Ante las integrantes del Comité de Mujeres del Foro Europeo de la Discapacidad, reunido hoy y mañana en Madrid, con los auspicios del CERMI, el representante español ha indicado que para hacer efectiva la igualdad de género, no solo hay que mirar hacia fuera, hacia los estados, los gobiernos, las leyes, las empresas, etc., sino incluso con prioridad hacia el interior del propio movimiento asociativo de la discapacidad, que está muy lejos haber alcanzado una situación satisfactoria.

 

Y no solo porque las mujeres y niñas con discapacidad son más numéricamente, dentro de la discapacidad, que lo son y con diferencia, sino porque su posición en cuanto a derechos, inclusión y bienestar es muchos más precaria que la de los varones con discapacidad. Las propias estructuras de la discapacidad, que son un movimiento de cambio social, repiten los esquemas del entorno, discriminan y excluyen a las mujeres.

 

La igualdad de género, señaló el presidente del CERMI, no es un tema más de la agenda política y estratégica de la discapacidad, es el gran tema, el preferencial, y a él hay que dedicarse con total convicción e intensidad, concluyó.