Ambos eventos, desarrollados el 22 y el 27 de noviembre con los lemas ‘Reivindiquemos la infancia: todas las personas merecemos una’ y ‘La educación como motor de cambio hacia una educación inclusiva’, iban dirigidas a la sociedad en general, y a los poderes públicos y a la comunidad educativa en particular.

 

Desde CERMIN son conscientes de que "la educación es uno de los ejes principales para impulsar el cambio social de nuestra Comunidad y es por eso, por lo que hemos decidido dedicar el mes de noviembre a incidir sobre esta cuestión", afirman.

 

En un momento en el que Navarra está sometiendo a la participación ciudadana distintos planes, como El Plan Estratégico de Atención a la Diversidad y el Plan Estratégico de Formación Profesional, que van a conformar el marco de actuación hasta 2020, CERMIN  ha valorado necesaria su contribución a la hora de impulsar la Educación Inclusiva en la Comunidad Foral.

 

En la sociedad actual, explica CERMIN, "está muy instaurada la competitividad basada en los resultados académicos. Se impregna el mensaje de que lo que no es productivo, resta. Esto se puede extrapolar al ámbito educativo, donde muchos de los criterios para determinar la posición del centro escolar son los distintos rankings basados en los resultados académicos, infraestructuras…"

 

Y esto trae consigo, a juicio del comité, que valores como la diversidad, la convivencia, solidaridad, el trabajo en equipo, la colaboración, cooperación, creatividad y el desarrollo de una cultura escolar positiva, no estén priorizados todavía por muchos sectores de la población, lo que hace más difícil instaurar una cultura inclusiva en el ámbito educativo.

 

Explica CERMIN que "no se han planteado rankings capaces de medir el valor humano de los centros escolares, ni muchos padres se han parado a pensar en esto, a la hora de hacer la elección de centro educativo para sus hijos e hijas", y aseguran que "está más que demostrado que las comunidades con un compromiso más fuerte de igualdad, registran niveles más bajos de agresiones directas, pero en muy pocas ocasiones ponemos el foco en estos aspectos". 

 

Este tipo de evidencias son las que han llevado a CERMIN a programar estas jornadas, ya que permitan redireccionar el foco en lo esencial de la educación, que no es otra cosa, que formar a las personas. Y ante este paradigma tradicional, se preguntan dónde quedan las personas con necesidades educativas especiales derivadas de discapacidad. El modelo educativo actual esta dividido en educación ordinaria y especial y en muchas ocasiones el alumnado con discapacidad tiene que enfrentarse a una educación segregada y degradada. Es por eso que CERMIN apuesta por la inclusión del alumnado con discapacidad en centros ordinarios, ya que favorece el aprendizaje de todo el alumnado en su conjunto.

 

Argumentan que "no se puede obviar que el Derecho a la Educación es un Derecho Humano Fundamental y así se queda recogido en el artículo 24 de la Convención Internacional sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad".

 

Por eso se defiende la libertad de elección de centro educativo de las familias y se reivindica que las familias cuenten con toda la información disponible, que se les dé el tiempo suficiente para madurar su elección y que se resuelvan todas las dudas que la familia pueda ir generando en ese proceso de elección de centro.

 

Una vez que los menores estén escolarizados, exigen a la Administración que los profesionales de los centros tengan formación específica en relación a la discapacidad, así como que se dote de los apoyos humanos, materiales y técnicos necesarios para procurar las adaptaciones que fuesen necesarias y para garantizar que el proceso de enseñanza-aprendizaje se da en igualdad de oportunidades que al resto de alumnado.

 

Se pone el acento, además, en hacer una investigación diagnóstica, que permita conocer las causas que motivan que el alumnado con discapacidad se va desdibujando en la medida que se incrementa el nivel educativo, para conseguir fomentar la presencia de alumnado con discapacidad en la enseñanza postobligatoria.

 

En la actualidad, CERMIN asegura que "se cuenta con pocos datos para sacar conclusiones lo suficientemente analíticas, para  adoptar medidas que nos permitan revertir este tipo de situaciones".

 

Para CERMIN la infancia y la educación son dos claras apuestas de futuro y en ese sentido, seguiremos luchando para que las personas con discapacidad tengan las mismas opciones educativas y laborales que el resto del alumnado y por construir entre todos y todas una sociedad más inclusiva, que entienda la diversidad como un valor que enriquece y siempre suma.