Tras una larga trayectoria en la Fundación Secretariado Gitano, decidió pasar a la política activa y formar parte de Ciudadanos. ¿Por qué decidió dar ese paso? ¿El mundo de la política era tal y como lo esperaba?

 

En mi trayectoria profesional de más de 18 años de trabajo en la Fundación Secretariado Gitano y en mi especialidad jurídica en derecho antidiscriminatorio, mi objetivo ha sido trabajar para promover la Igualdad real de los grupos vulnerables, con especial incidencia en el pueblo gitano y específicamente en las mujeres gitanas. Cuando tuve una oferta clara y directa, en la que observé un gran interés por mi recorrido profesional por parte de Albert Rivera, pensé en la gran oportunidad que tenía de continuar trabajando desde la primera línea en aquello en lo que creo: la igualdad de trato y de oportunidades de todas las personas, en abordar la discriminación que todavía está presente en nuestra sociedad. 

 

Observé que Ciudadanos era un partido abierto a la incorporación de profesionales de la sociedad civil, no era necesario un carnet de partido para hacer política útil y buena para los ciudadanos. Además, se trata de un partido moderado, defensor de los valores constitucionales y firme en la lucha contra la corrupción, por lo que desde el primer momento tuve muy claro que era el partido en el que iba a sentirme cómoda. Por ello, acepté esta gran oportunidad de formar parte del poder legislativo y trasladar todo mi conocimiento adquirido por mi experiencia personal y laboral, para construir una sociedad más respetuosa con los derechos humanos. Lo viví como una gran responsabilidad y una gran oportunidad, ¡algo de vértigo! Además, como mujer gitana me parecía importante dar un paso al frente, dado que la representación de gitanos en política es mínima y es vital nuestra participación activa en todos los espacios de la sociedad. Supone un avance en el reconocimiento y defensa de mi pueblo en el que tenemos que seguir trabajando.

 

El mundo de la política que me ha tocado vivir desde mi incorporación es muy intenso, las campañas electorales son mejores de lo que me esperaba, participar en grandes mítines ha sido de las mejores experiencias de mi vida. Junto a ello, defender tus propuestas en la tribuna del hemiciclo me provoca una gran satisfacción. Estoy conociendo a grandes personas que me aportan muchísimo. Mi perfil en política quiero que se caracterice por la constructividad y el diálogo. Quiero trabajar para resolver los problemas reales de las personas que se encuentran en peor situación, y para ello es vital mantener los pies en la tierra. Me alejo de algunas formas de hacer política basadas en la crispación, que creo que no aporta nada a la vida parlamentaria. Me gustaría que los medios de comunicación se interesaran más por la política social desde las propuestas para resolver los problemas de la gente, que son muchísimos.

 

Con mis compañeros de partido y de otras formaciones la relación es muy buena, me gusta especialmente el trabajo en las comisiones parlamentarias. Con toda la situación que he tenido que afrontar estoy en un máster acelerado y muy contenta. Me queda mucho por hacer…

 

¿Qué demandas y peticiones de la discapacidad comparte e impulsa desde su formación? 

 

Desde Ciudadanos tenemos un gran compromiso por el trabajo en la Igualdad real de las personas con discapacidad, agradecemos la colaboración directa y permanente que tenemos con el CERMI para conocer la realidad de las personas con discapacidad y agradecemos la gran labor que desarrollan. 

 

En este sentido, apostamos por la Ley de Accesibilidad Cognitiva que hemos presentado, y para la que hemos recabado un apoyo unánime, o por La Ley de Propiedad Horizontal en la que estamos trabajando.

 

En materia de discapacidad sensorial, vamos a revisar las medidas de accesibilidad en medios de comunicación y el abordaje de la sordocegera. Junto a ello, y de manera más transversal, nos parece importante contemplar la promoción de la igualdad de las personas con discapacidad en materia educativa, vivienda, empleo, etc.

 

Usted ha sido activa en la petición para acabar con las esterilizaciones forzosas, ¿en qué estado se encuentra este trámite que supone una vulneración de los derechos de las mujeres y las niñas con discapacidad?

 

Es una propuesta de la que nos sentimos especialmente orgullosos, porque supone un importante avance en la defensa de los derechos fundamentales de las mujeres con discapacidad; se encuentra en trámite de convocatoria a ponencia desde la comisión de justicia. Una propuesta en la que hemos conseguido el apoyo del resto de formaciones políticas, un consenso que demuestra que en la defensa de derechos humanos tenemos que dar la talla política.

 

Me he posicionado muy en contra de la esterilización forzosa, dado que es una vulneración flagrante de los derechos de las mujeres. He conocido testimonios muy duros de mujeres que han sido víctimas de la misma, me han expresado que deciden hacerlo porque el sistema no les ofrece otra salida ni soporte, de una forma automatizada. Recuerdo perfectamente cómo me decían “es muy duro que te hagan creer que no es posible que seas madre, que no tengas otra alternativa”. Tiene consecuencias psicológicas muy duras, y su dignidad queda por los suelos. Junto a ello, ha habido algún caso que he seguido muy de cerca en relación a las esterilizaciones forzosas de mujeres gitanas en países como Eslovaquia, caso por el que en 2011 se condenó a Eslovaquia por parte del Tribunal Europeo de Derechos Humanos.

 

¿Qué medidas propone su partido para que la crisis no vuelva a cebarse con los sectores más desfavorecidos?

 

En el marco de trabajo de la Comisión de Reconstrucción, la posición de Ciudadanos ha sido muy clara: reforzar la igualdad entre los españoles y garantizar que nadie se quede atrás. Creemos que es importante consolidar el marco de protección frente a emergencias, analizando qué ha funcionado bien y qué no, dónde nos hemos quedado cortos. Tener claro nuestro punto de partida. Esta crisis ha puesto de manifiesto las debilidades de nuestro sistema y ahora tenemos la ocasión de reforzarlo para garantizar una plena inclusión social. Desde Cs hemos propuesto medidas concretas para grupos de población que somos conscientes de que se han visto más azotados por la crisis; garantía habitacional para personas sin hogar y quienes viven en infraviviendas, accesibilidad de la información a personas con discapacidad, acceso a las prestaciones a los vendedores ambulantes e incentivar su vuelta al trabajo, garantizar el acceso a la prestación por parte de las empleadas del hogar, promover el acceso a las prestaciones y reconocimiento en hacienda de los feriantes, garantizar la alimentación y protección de los menores en entornos desfavorecidos, establecer protocolos claros para proteger a nuestros mayores, entre otras. Actualmente, estamos esperando que Podemos y el partido Socialista abandonen el sectarismo en el bloque educativo del dictamen para la reconstrucción social y económica, esperamos que realmente quieran velar por la garantía del derecho a la educación de todos los niños, abordando las brechas de desigualdad que existen en determinados hogares. 

 

¿Cuál es su posición de cara a los próximos presupuestos generales del Estado? 

 

Desde ciudadanos tenemos claro que no queremos que nadie se quede atrás, y para eso es necesario hacer borrón y cuenta nueva, elaborar unos Presupuestos de salvación nacional concebidos, calculados y cuadrados con base en la crisis del COVID-19. Esta es nuestra posición y la hemos demostrado apoyando el ingreso mínimo vital. Consideramos que la política social será uno de los pilares de los próximos presupuestos teniendo en cuenta la situación que ha generado el COVID 19. Hay que dar respuesta a las necesidades de todas las familias desde una posición eficiente. Creemos que la educación y el empleo son dos llaves fundamentales para contribuir al acceso a la vida digna de todas las personas, son una apuesta firme de Cs. 

 

¿Identifica déficits en la legislación española en materia de igualdad de trato?

 

El gran deficit pendiente es la Ley Integral de Igualdad de Trato y no Discriminación. Nuestro país, desde el año 2003, tenía la obligación de trasponer adecuadamente la Directiva 2000/43/CE de 29 de junio, relativa a la aplicación del principio de igualdad de trato de las personas, independientemente de su origen facial o étnico. En ese momento, el 30 de diciembre del año 2003 se hizo una transposición de mínimos y en una legislación cajón de sastre como lo es la Ley de acompañamiento a los presupuestos generales del Estado. No se demostró voluntad política por esta materia. A fecha actual, y después de varios intentos, no contamos con una Ley Integral de Igualdad de Trato y no Discriminación, por ello, desde la Comisión Europea contra el Racismo y la Intolerancia (ECRI) nos han recomendando en su último informe la necesidad de la misma. 

 

En España uno de los principales problemas en los que se traduce el rechazo hacia determinadas personas gitanas, con discapacidad, LGTBI, migrantes, personas sin hogar, etc. es la discriminación cotidiana en el acceso al empleo, la vivienda, la educación, los bienes y servicios. Los efectos son devastadores en la vida de las personas y en nuestro país todo comportamiento discriminatorio que no constituye un delito se queda en un vacío legal que provoca una gran indefensión. Me parece muy poco realista mirar para otro lado ante determinadas realidades; cuando a una persona se le niega un trabajo no por su capacitación sino por tener una  discapacidad, que no se alquile a una familia una vivienda porque el simple hecho de ser gitana, etc. Es fundamental activar los mecanismos legales para que avancemos en igualdad.   

 

¿Es optimista de cara al futuro? ¿Qué cree que falta todavía para que términos como racismo o discriminación pasen a ser reliquias del pasado?

 

La discriminación y el racismo pueden quedar atrás si trabajamos de verdad desde la educación y la sensibilización social, el conocimiento de la diversidad, si la sociedad asume nuestro modelo intercultural y el respeto a la diferencia. Creo que las familias también tenemos una responsabilidad en educar en valores a nuestra nueva generación. Me parece fundamental convivir, conocernos, compartir, en las escuelas, la universidad, el trabajo, el barrio. Junto a ello, los medios de comunicación social es importante que contribuyan a ello, que promuevan una imagen social heterogénea de los diversos grupos afectados por la discriminación y no se fomenten prejuicios ni estereotipos. En la actualidad, tenemos muchos discursos discriminatorios y de odio en redes sociales e internet. 

 

Por otro lado, debemos reforzar la lucha contra la discriminación desde un buen marco legal; la legislación en esta materia enseña a la sociedad los comportamientos que no son admisibles. Soy optimista porque la legislación avanza, hay entidades que realizan una gran labor en esta materia, existen instituciones europeas que trabajan con la mirada puesta en los discursos de odio y extremos que son un riesgo importante para avanzar en Igualdad. En una sociedad avanzada como la nuestra, tenemos que blindarnos frente a los discursos populistas que promueven el rechazo social y la estigmatización de determinados colectivos. Soy positiva porque somos una gran sociedad, se ha demostrado claramente en esta crisis, y estoy segura que vamos seguir trabajando para vencer la lacra de la discriminación y el racismo, que nos hace peores como sociedad.