Hace apenas unos días, el Patronato de la Fundación CERMI Mujeres (FCM) mantuvo una reunión de trabajo durante la que se analizaron las actividades llevadas a cabo por la entidad en 2016 y se aprobó el plan de actuación para el próximo ejercicio. El balance que se expuso en esa reunión fue positivo, según relata la coordinadora de la Fundación CERMI Mujeres, Isabel Caballero: "los patronos y patronas mostraron su satisfacción con el trabajo que desarrollamos desde hace tan solo dos años".

 

En ese mismo sentido, el presidente de la FCM, Luis Cayo Pérez Bueno, reconoció la importante labor que en estos dos años ha desarrollado la FCM en su tarea de reivindicación de los derechos humanos de las mujeres y niñas con discapacidad, y animó a continuar en esa senda. Por su parte, Pilar Villarino, secretaria del Patronato de la FCM afirma que "la Fundación CERMI Mujeres es una entidad muy joven, pero en este poco tiempo ha logrado hacerse un hueco y darse a conocer entre las entidades del sector social de la discapacidad, las organizaciones de mujeres y las instituciones públicas".

 

 

"El gran eje en el que venimos trabajando especialmente es el tema de la prevención y las denuncias de situaciones de violencia contra las mujeres", asegura Isabel Caballero y explica que en este sector de la población se da una mayor vulnerabilidad ante la violencia  y sin embargo los recursos que existen para dar respuesta a esta situación no son siempre accesibles, "no están pensados para todas las mujeres en su diversidad", anota.

 

La FCM se centra sobre todo en esta cuestión de la violencia, que también es uno de las principales preocupaciones del resto de ciudadanos y autoridades, porque el caso de la mujer con discapacidad es distinto, "es un tema muy especializado, la Fundación está dando voz a muchas mujeres que no se ven en ningún sitio, son invisibles sobre todo en el tema de violencia, porque no hay otras organizaciones que estén representando a estas mujeres", explica la coordinadora de la FCM. 

 

Este instrumento inclusivo, que arrancó este año y está financiado por el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, sirve para ofrecer a las mujeres con discapacidad víctimas de violencia todos los recursos disponibles en la red de servicios públicos y privados en esta materia. También pretende asesorar y acompañar a un número cerrado de mujeres con discapacidad víctimas de violencia, las  beneficiarias, así como ampliar el servicio y enriquecerlo con la experiencia que vaya adquiriendo a lo largo de los años. 

 

El Programa de intermediación para las mujeres con discapacidad víctimas de violencia es uno de los ejes fundamentales de las actividades que desarrolla la FCM y en poco tiempo ha conseguido afianzarse. Está financiado por el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad y en 2017 se reactivará con una segunda edición. 

 

Además, en torno a la violencia, la FCM despliega también su actividad en iniciativas especiales, como ha sido la puesta en marcha de la primera edición del 'Concurso de Fotografía Generosidad’, fallado recientemente y centrado, en esta edición, "en una de las formas de violencia más tremendas que hay, que es la esterilización forzosa", explica Isabel Caballero. Y todavía quedan flecos para finalizar esta tarea ya que, como relata Pilar Villarino, "en las próximas semanas celebraremos la entrega de premios y haremos una exposición con las fotografías elegidas". 

 

 

En cuanto a la importante tarea de mostrar la realidad de esta violencia, la FCM trabaja en la elaboración de estudios que puedan arrojar más luz entre tanta sombra. Así, sobre la "Macroencuesta de violencia contra la mujer 2015", elaborada por el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, la FCM ha hecho un análisis más profundo a partir de los microdatos de ese trabajo, "con la idea de poner sobre la mesa cuál es realmente la incidencia que tiene la violencia de género, la ejercida por parejas, o ex parejas, no estamos hablando de todas las violencia que las mujeres con discapacidad pueden padecer, ya que hay mucha violencia intrafamiliar, violencia institucional… es un informe muy interesante con el que vamos a seguir trabajando", explica Isabel Caballero. Además y de cara al futuro, continúa Caballero, "estamos haciendo lobby, presión, para que los poderes públicos, sobre todo el Ministerio y la delegación del Gobierno para la violencia de género, tengan en cuenta en sus registros a las mujeres con discapacidad en temas de violencia".

 

Otra cuestión relacionada con la violencia es el trabajo desarrollado con la ayuda de la Fundación Vodafone para la puesta en marcha de una aplicación de móvil y tableta para cualquier mujer con discapacidad, con información sobre cuáles son las situaciones de violencia y dónde pueden acudir. Todo en formato accesible, habrá una presentación próximamente.

 

Y finalmente, el cierre de este año ha tenido un broche de oro para la FCM en temas de violencia, ya que el pasado 25 de noviembre, día dedicado a la eliminación de la violencia contra las mujeres, recibió el reconocimiento del Gobierno, concedido a través del ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, a las mejores prácticas contra la violencia de género, por su actividad en favor del empoderamiento y la autodefensa de las mujeres y niñas con discapacidad contra todo tipo de agresiones, maltratos y abusos. Es un recuerdo especial para la coordinadora de la FCM: "Para ser una organización que solo lleva dos años en funcionamiento es un espaldarazo importante, pero hay que tener en cuenta que aunque la fundación es joven, quienes están detrás son gente que lleva muchos años en el tema y no se ha partido de cero, también es un reconocimiento al trabajo que lleva realizando el CERMI con la Comisión de Mujer desde hace tiempo".

 

Y si de premios se trata, merece la pena recordar también el que el CERMI entregó a la Unidad de Familia y Mujer (UFAM) de la Policía Nacional en reconocimiento a su atención a "la situación específica de las mujeres con discapacidad". Se trataba del Premio cermi.es en la categoría Institucional, otorgado por los cursos de especialización en materia de violencia y discapacidad, unos cursos desarrollados en colaboración con la FCM, que en enero comenzarán su cuarta edición.

 

 

Precisamente ese premio a la UFAM está relacionado con otra vertiente que la FCM explota con buen criterio. Los cursos de formación de la fundación también se afianzan e incluso son solicitados por otras entidades. "Hemos estado trabajando con distintas universidades, con cursos de posgrado, yendo a conferencias, en los institutos de administración pública de algunas comunidades autónomas que se pusieron en contacto con nosotros para que diéramos formación en temas de discapacidad y también a través de convenios que hemos suscrito", explica Caballero.

 

La formación que imparte la FCM se divide por un lado en formación dirigida a la administración pública, incluyendo a expertos e incluso personal político, y por otro a entidades del sector de la discapacidad. "Nos parece fundamental hacer formación con las entidades del tejido asociativo de la discapacidad y tenemos por ejemplo un convenio con la Fundación ONCE, también con la ONCE, para formación en temas de igualdad de género al alumnado del CRE, que es muy enriquecedor para la FCM porque nos aporta información, es un acercamiento a lo que está pasando en niños y niñas y adolescentes, y otro convenio que hemos firmado recientemente con Predif, entre otros", afirma la coordinadora de la FCM. 

 

Y es que para la FCM es fundamental el trabajo en coordinación, tanto en nuestro país, como fuera de nuestras fronteras, como explica Pilar Villarino: "Para la Fundación CERMI Mujeres es esencial tener presencia en el exterior y poder poner nuestra experticia y conocimiento al servicio de las instituciones públicas y de la sociedad civil del entorno europeo e internacional. Es importante igualmente ayudar al empoderamiento de las mujeres y niñas con discapacidad fuera de nuestro país".

 

En el trabajo interno, de fronteras para adentro, Villarino adelanta que en 2017 "vamos a completar la presentación territorial de la Fundación en todos los territorios". Como asegura Isabel Caballero, este recorrido autonómico es importante porque "siempre tenemos que trabajar contando con la estructura asociativa que ya existe en los territorios, es fundamental crear argumentarios comunes, trabajando en reivindicaciones comunes". 

 

 

Aunque ha sido un año complicado en cuestiones políticas, sobre todo a la hora de formar Gobierno, la FCM ha emprendido en 2016 un trabajo de incidencia política y se ha reunido con todos los partidos, reclamando el espacio merecido para las mujeres con discapacidad. Y como explica la coordinadora de la fundación: "Recientemente se han cumplido 10 años de la Ley de Autonomía y hemos hecho una demanda para que se reactive y tenga en cuenta la situación específica de las mujeres, sobre todo poniendo el peso en el empoderamiento y la promoción de la autonomía personal ya que es muy importante para las mujeres empoderarse y conocer sus derechos para salir, por ejemplo, de los temas de violencia. También la reactivación de la ley es conveniente en cuanto a las cuidadoras, que la mayoría son mujeres. Esta ley tiene mucha pertinencia de género y nos interesa que se reactive".

 

La FCM mira al futuro con esperanza y con mucha fuerza ya que entienden que la tarea pendiente es todavía abultada, así apuntan la necesidad de trabajar con otras entidades de mujer para dar a conocer la esencia de la fundación, la continuidad de iniciativas como el concurso de fotografía, o la continuación del programa de voluntariado y de las acciones de comunicación, con el boletín ‘Generosidad’ como punta de lanza. Además, destaca también la puesta en marcha del Observatorio sobre Derechos Humanos de las Mujeres con Discapacidad, la publicación de estudios en materia de violencia de género contra las mujeres con discapacidad y las esterilizaciones forzosas, y el desarrollo de acciones de formación en materia de derechos humanos, género y discapacidad.

 

En el ámbito de los derechos humanos, finalmente, Isabel Caballero explica que la FCM es una entidad de discapacidad, feminista y de derechos humanos, "está todo imbricado, relacionado, no se puede hablar de discapacidad hoy día sin hacer referencia a la Convención, que es un tratado de derechos humanos, hablamos en última instancia de derechos humanos y los movimientos feministas no son más que la lucha por la igualdad de derechos desde un enfoque de derechos humanos. Es todo lo mismo".