
"4,32 millones de personas con discapacidad,
más de 8.000 asociaciones luchando por sus derechos"
Publicación
“Geografía de rebeldes”, nuevo título de la colección Empero del CERMI
12/07/2014
“Geografía de rebeldes”, de la escritora portuguesa Maria Gabriela Llansol, es el nuevo título de la colección de libros Empero, editada por el CERMI, y que ofrece al público lector obras literarias cuyos ejes temáticos son la discapacidad y la diversidad humana.
La tesis central de Maria Gabriela Llansol es el hombre será. Dicho de otra manera, aún no es, a lo largo de la Historia ha dado la espalda al ser en beneficio del poder.
“Mi texto -escribe la autora portuguesa, poco conocida en España-, es transparente, es el lugar, no de lo que podía haber sido y no fue, sino de aquello que en él es y un día será fuera de él.”
Maria Gabriela Llansol convoca razón, creencia, visión y realidad en una mezcla compleja. Elige la alta cultura europea a través de figuras históricas en las que empieza por reconocerse y a las que salva en el texto. El elemento mítico lo constituyen las comunidades de rebeldes, campesinos y religiosos, transmutadas fuera del tiempo en una suerte de Santa Compaña fantástica, abierta a todos los seres.
En “Geografía de rebeldes” no hay mito fundacional, sino mito final. El discurso se inscribe en las convulsiones espirituales y sociales del Sacro Imperio hasta la Reforma protestante, cuya “magnífica anarquía” de los primeros tiempos contrapone al ambiente de la Contrarreforma en Portugal.
Maria Gabriela Llansol (1931-2008) nació en el seno de una familia de tradición republicana, en el barrio lisboeta de Ourique, donde vivió Pessoa. Después de licenciarse en Derecho en el Portugal de los años cincuenta, estudió Pedagogía y abrió una de las primeras escuelas infantiles.
En 1965 se exilió a Bélgica, donde residió con su marido José Augusto Joaquim hasta 1983, en que vuelve a Portugal. Durante ese tiempo compartió la suerte de los miles de emigrantes portugueses a la Europa del norte. Trabajó como panadera y participó en una experiencia pedagógica radical con niños belgas e hijos de emigrantes, algunos de ellos con discapacidades. Desde 1983 residió en Sintra dedicada a su labor de escritora y traductora. En 1990 recibió el Premio Nacional de Novela otorgado por la Asociación de Escritores Portugueses, galardón que volvió a recibir en 2005.