Marlaska hizo este llamamiento al inaugurar en Zaragoza el VI Encuentro de Ciudades para la Seguridad Vial y la Movilidad Sostenible, que se celebrará hasta este viernes bajo el lema ‘Ciudades 2030’ con el fin de definir estrategias para reducir a la mitad el número de fallecidos y heridos graves en carretera a finales de esta década.

 

Marlaska sentenció que “el peatón es el vértice de la pirámide de prioridades respecto a la movilidad urbana”, por lo que llamó a las Administraciones públicas a garantizar “itinerarios peatonales accesibles, continuos y seguros”, así como el acceso y el uso del transporte público.

 

También se dirigió a los conductores, sobre todo los de patinete eléctrico y bicicleta, para que no circulen por las aceras y no impidan la libre deambulación aparcando sus vehículos.

 

La Dirección General de Tráfico lanzará el próximo lunes una campaña de concienciación social en este sentido, con el apoyo de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), la Red de Ciudades que Caminan, el CERMI y la Confederación Española de Organizaciones de Mayores (Ceoma).

 

Esta campaña, según Marlaska, debería ser “completada” con más vigilancia y control de las policías locales, sobre todo en las ciudades con más de 50.000 habitantes.

 

Para Marlaska, las aceras deben ser espacios públicos en los que debe garantizarse “la accesibilidad universal y segura de colectivos como los niños, las personas de edad avanzada y las de movilidad reducida”.

 

 

Por otro lado, Marlaska recordó que la siniestralidad vial en las ciudades españolas “no ha evolucionado de manera satisfactoria” porque el número de personas fallecidas en las calles ha bajado un 11% entre 2009 y 2019, cuando ese descenso es de un 42% en las carreteras y también en ese periodo.

 

“Si esa estadística es preocupante, más lo es el dato de que ocho de cada 10 personas fallecidas son usuarias vulnerables de la calle: peatones, ciclistas o conductores de vehículos de movilidad personal y motoristas”, añadió.

 

El Ministerio del Interior se propone en esta década aumentar la movilidad activa -es decir, la que se realiza a pie y en bicicleta- para reducir el impacto ambiental del transporte, reducir los atascos y mejorar la salud de la población.

 

En el caso de los vehículos de movilidad personal, como los patinetes eléctricos, Marlaska comentó que queda regular sus características técnicas, la edad mínima de conducción y el equipamiento protector. “Estudiamos ya, con el resto de las administraciones competentes, la introducción de un seguro obligatorio”, apostilló.

 

“No estamos en contra de los vehículos, estamos en contra del mal uso de los mismos. Lo que queremos es, como nos pide Naciones Unidas, calles para la vida y, sobre todo, calles para vivir. Queremos que las calles de nuestras ciudades recuperen ese papel de foro público de interacción social que nos permite a ciudadanas y a ciudadanos relacionarnos, interactuar y crecer como sociedad moderna, sociedades comprometidas con el prójimo y con su entorno vital. En definitiva, queremos calles para ejercer la ciudanía seguros y en libertad”, concluyó.

 

Fuente: Servimedia