"4,32 millones de personas con discapacidad,
más de 8.000 asociaciones luchando por sus derechos"
Opinión
Prólogo del secretario de Estado de Servicios Sociales e Igualdad, Juan Manuel Moreno Bonilla para el Manual sobre transversalidad de género del CERMI
07/05/2012
La realidad que sufren las personas con discapacidad es, la mayoría de las veces, solo conocida por quienes la protagonizan y por sus familias. Desde esta Secretaría de Estado de Servicios Sociales e Igualdad y siempre de la mano de la Dirección General de Apoyo a la Discapacidad, estamos profundamente comprometidos con la sensibilización de todos los ciudadanos frente a la desigualdad de oportunidades que sufren estas personas.
La desigualdad puede producirse por cuestiones de género, edad, raza, etnia, ideología, religión o, como nos emplaza este manual, por cuestiones relacionadas con la discapacidad. Si a las propias dificultades a las que se enfrentan las personas con discapacidad le unimos el género, nos encontramos con muchas mujeres con discapacidad sufriendo discriminación y desigualdad de trato en mayor medida que los hombres con discapacidad.
En la actualidad, las mujeres representan más del cincuenta por ciento del talento de este país y estamos en la obligación moral de aprovecharlo. Si ahora mismo una mujer necesita trabajar sesenta días más que un hombre para recibir el mismo salario por igual trabajo o trabajo de igual valor, imaginémonos las dificultades a las que se enfrenta una mujer con discapacidad en la misma circunstancia.
Aunque las mujeres han sido líderes importantes dentro de los cambios de nuestro país, su presencia en puestos de decisión es aún muy mejorable. Los hombres tenemos una gran responsabilidad en la lucha por la igualdad de oportunidades de las mujeres y sobre todo, tenemos que demostrar nuestra implicación real dentro de las labores de conciliación y corresponsabilidad.
Este manual que presenta el CERMI, nos sirve para enfocar la atención social sobre las mujeres con discapacidad que sufren diariamente la desigualdad y la discriminación en los distintos aspectos de sus vidas.
Quisiera aprovecha la ocasión que me brinda el prologar este Manual, para emplazar a la distintas administraciones y entidades a que pongamos todo nuestro esfuerzo e interés en que todas las políticas de apoyo a la discapacidad contemplen, con gran sensibilidad, la perspectiva de género y permitirles así, que rompan el techo de cristal que les asola.
La Secretaría de Estado de Servicios Sociales e Igualdad que tengo el honor de dirigir, apoya con empeño y constancia todas las iniciativas dirigidas a promover que la persona, hombre y mujer con discapacidad, con sus singularidades y necesidades específicas, esté en el eje de todas las acciones.
Quisiera felicitar al CERMI su entrega y esfuerzo diario por la defensa de los derechos de las personas con discapacidad y por su colaboración inestimable en la lucha por la igualdad de oportunidades.
Juan Manuel Moreno Bonilla, Secretario de Estado de Servicios Sociales e Igualdad
Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad