"4,32 millones de personas con discapacidad,
más de 8.000 asociaciones luchando por sus derechos"
Reportaje
‘Observatorio de la Accesibilidad Universal en la Vivienda en España 2013’, elaborado por Fundación ONCE y Vía Libre, con la colaboración del CERMI
Viviendas o prisiones
11/12/2014
Blanca Abella
La vivienda proporciona abrigo, privacidad y bienestar. El lugar que habitan muchas personas con discapacidad parece, sin embargo, una prisión. Según datos derivados del ‘Observatorio de la Accesibilidad Universal en la Vivienda en España 2013’, el 75% de los edificios destinados a vivienda en España no son accesibles. La investigación efectuada en este estudio revela la falta de formación en diseño para todos de los profesionales del sector, así como un incumplimiento generalizado de los requisitos y normativa vinculada a la accesibilidad universal de las viviendas en España. Apostar por la formación en diseño para todos, incidir en investigación, cumplir la normativa y fomentar la participación social son algunas de las recomendaciones del Observatorio.
Por eso, el objetivo de este Observatorio era analizar la accesibilidad del parque de viviendas familiares de uso principal en España, determinar posibles variables que están influyendo en la accesibilidad, proponer recomendaciones orientadas a la mejora y realizar mediciones posteriores para conocer la evolución en este ámbito.
Un fracaso colectivo
Y los resultados de este trabajo confirman algo que en el sector ya venían temiendo y denunciando, como explica el propio presidente del CERMI, Luis Cayo Pérez Bueno, en las primeras páginas de esta publicación: "Este estudio nos confirma un pálpito, un amago de certeza, firme pero oscura, el de haber fracasado como colectividad organizada en la garantía para toda la ciudadanía –incluidas las personas con discapacidad y las personas mayores– de algo tan básico como el ejercicio del derecho a una vivienda digna. Nuestro parque de viviendas no es digno por la acusada ausencia de condiciones de accesibilidad que padece, y sigue padeciendo tantas décadas después".
En general, la sensación de los expertos en el estudio, del sector de la discapacidad y de todos aquellos que se acercan a sus páginas es la de derrota, la del suspenso definitivo en una asignatura vital. Según Carlos Sánchez, técnico de Accesibilidad Universal de la Fundación ONCE: "El estudio concluye que existe una falta de accesibilidad universal en las viviendas que habitamos, es decir, el diseño de las mismas no responde a las necesidades de las personas con independencia de sus capacidades. A este respecto, se detecta una falta de soluciones arquitectónicas y en las instalaciones que afectan en distinto grado a todos los colectivos de personas con discapacidad. Partiendo de esa base, el impedimento que puedan tener las personas que por falta de movilidad no puedan salir de sus casas debido a la falta de itinerarios accesibles en la comunicación horizontal y vertical es un hecho gravísimo".
Y los datos del informe son concluyentes, el acceso es el primer eslabón fallido de la cadena de accesibilidad en las viviendas españolas, ya que solamente 2 de cada 100 viviendas disponen de un acceso con unas características adecuadas de accesibilidad universal, según los criterios establecidos por la normativa. Asimismo, se identifican deficiencias en elementos como el ascensor, los garajes y zonas de aparcamiento, así como las zonas de uso común, siendo la propia vivienda el espacio más accesible de todos los elementos analizados. La zona de acceso al interior del 55,9% de las viviendas se puede considerar accesible y en el 88% de las viviendas no existen problemas de accesibilidad para sus ocupantes en ninguna de las estancias principales de la misma.
Formación de profesionales y otras soluciones
Si hace años las accesibilidad no era entendida por casi nadie, la triste realidad es que hoy, ahora, todavía existe escasa sensibilidad a este tema, una cuestión de derechos humanos. Y lo demuestra el mismo observatorio, que concluye que "se siguen diseñando y construyendo viviendas en las que se aplican criterios de accesibilidad sin entender su porqué. En este sentido, aunque se reconoce el esfuerzo desarrollado para incorporar mejoras, se continúan detectando errores de diseño y ejecución de las soluciones aportadas que muestran que se sigue sin tener en cuenta las necesidades de las personas que las utilizarán".
Por todo ello, el Observatorio incluye una serie de recomendaciones, que inciden en la necesidad de profundizar en la formación en diseño para todos dirigida a los profesionales del sector, tanto en licenciaturas vinculadas a la arquitectura e ingeniería, como en la formación destinada a los técnicos y gestores de las administraciones públicas, y a los promotores y constructores responsables del producto final. Como apunta Carlos Sánchez, "la formación de los distintos actores del sector parece fundamental a la hora de que estos entiendan el por qué se han de aplicar los diferentes criterios de accesibilidad a la hora de proyectar y ejecutar nuestras viviendas". Y añade: "Lógicamente la falta de accesibilidad de la mayoría de nuestras viviendas tiene su origen en la falta de conocimientos en la materia de los profesionales encargados de su diseño y construcción. En este sentido, la accesibilidad no ha sido una materia estudiada en las diferentes universidades, entre otras causas, porque no resultaba de obligado cumplimiento hasta hace relativamente poco tiempo. En la actualidad, la inclusión de distintos parámetros de accesibilidad en el Código Técnico de Edificación según el Real Decreto 173/2010, supone una exigencia que esperemos revierta la situación".
Además, sería fundamental la participación del propio sector de la discapacidad en la búsqueda de soluciones a este problema, como explica Jesús Hernández, Director de Accesibilidad Universal de la Fundación ONCE: "La participación de las personas con discapacidad y sus organizaciones representativas en diferentes comités o espacios de interrelación ciudadana, la cooperación con entidades de personas mayores, etc. es imprescindible para compartir necesidades y soluciones. Creemos sinceramente que desde las organizaciones de personas con discapacidad podemos aportar mucho para que la mayoría, especialmente las personas mayores, tengamos una vida más digna y en igualdad de oportunidades".
Normativa
Respecto del marco normativo, el Observatorio muestra que muchos de los parámetros recogidos en el Código Técnico de la Edificación no se cumplen. Esto es debido en parte a la diferencia entre la fecha de construcción de las viviendas y las últimas modificaciones aplicadas a este código por lo que, según recoge el estudio, es razonable esperar un incremento progresivo del parque de viviendas accesibles en España.
Tal y como explica Hernández: "Se detecta, un incumplimiento generalizado que se debe fundamentalmente a fallos en los mecanismos de control y a la carencia, hasta hace muy poco, de un régimen de infracciones y sanción. Que funcionen los mecanismos de control, a través de quienes visan y autorizan los proyectos de construcción es imprescindible para que las futuras viviendas sean accesibles, pero, también lo es para que la rehabilitación de las actuales las convierta en vivibles para sus moradores".
Entre las recomendaciones del Observatorio también se encuentra la de avanzar en el desarrollo del marco normativo y su cumplimiento, a través de la ampliación y mejora del Documento Básico de Seguridad de Utilización y Accesibilidad del Código Técnico de Edificación; la unificación de los parámetros recogidos en las distintas normativas de accesibilidad; el fomento de la aplicación de la Ley 8/2013 de Rehabilitación, Regeneración y Renovación Urbana; el avance en la gestión de la adjudicación de viviendas adaptadas de protección oficial, y el aumento de control y supervisión de ejecución de la normativa.
Sensibilidad social e investigación
Según el estudio, aunque el problema es de todos, la sociedad española tiende a vincular el concepto de accesibilidad con unas necesidades específicas propias de las personas con discapacidad física y personas mayores, y siempre ligado a dificultades de deambulación. A pesar de esto, aun queda una esperanza, y es que también se percibe un incremento de la demanda de determinados elementos especialmente vinculados a la comodidad y facilidad de uso para todas las personas.
Según explica Jesús Hernández: "Las referencias a la comodidad y facilidad de uso son las que mejor resultado dan y pueden dar en el futuro a la hora de informar a la sociedad en general de las ventajas de la accesibilidad tal y como se comprueba en el estudio al encontrar la mayor coincidencia entre la percepción de los entrevistados y la evaluación con criterios técnicos expertos en el caso del ascensor, que es un elemento ya conocido y valorado por todas las personas como necesario e, incluso, imprescindible –cuando se lleva la compra, cuando se tienen niños, cuando se es mayor, cuando se está cansado,… Esto se refleja claramente en los anuncios y ofertas de venta y alquiler de vivienda, mientras que, todavía, no se reflejan, más que excepcionalmente, otras cuestiones como videoportero o accesos fáciles o…".
Además, el estudio también destaca la necesidad de apostar por la innovación e investigación mediante la creación de redes de conocimiento formadas por grupos de entidades multidisciplinares, que aúnen esfuerzos de cara a facilitar una flexibilización de las viviendas y hacer viable, tanto técnica como económicamente, su adecuación y facilidad de uso para todas las personas. Según Hernández: "Se precisa investigación e innovación para avanzar con mayor rapidez y acierto. Y, con independencia de que, desde la Fundación ONCE, desde el CERMI y desde otras entidades, se han venido haciendo y seguirán haciéndose importantes esfuerzos, se trata de que las facultades y escuelas universitarias, los centros de investigación y las empresas, cada una en su campo de conocimiento, conectados entre sí y con las personas con discapacidad avancen en la aportación de soluciones. Habría respuestas más fáciles y en menos tiempo si se implicaran los profesionales y, especialmente, quienes se dedican a la investigación en cada uno de los campos, siempre, claro está, de la mano de quienes precisan esas soluciones; es decir, establecer redes que hagan que el conocimiento esté ligado a las necesidades de la vida cotidiana de las personas".
Inversión
En relación a la oferta de viviendas que se ponen en el mercado, la investigación concluye que en general no responden a las necesidades de accesibilidad de las personas, dado que sigue estando presente la idea de que lograr viviendas universalmente accesibles es muy costoso, y por tanto, avanzar en accesibilidad es incrementar el precio final. Esto contribuye a que quienes diseñan, construyen y promueven viviendas no aborden esta cuestión en profundidad.
Sin embargo, para los expertos del estudio, este tema está claramente mal enfocado, según las explicaciones del Director de Accesibilidad Universal de la Fundación ONCE: "la condición de universalmente accesible dota a las viviendas de un innegable valor añadido, por cuanto que aportarán mayor confort y seguridad en el uso, desde el primer momento, y sostenibilidad al asegurar su habitabilidad durante más tiempo sin necesidad de reformas y dando respuesta ante las diversas condiciones y circunstancias cambiantes de la vida de quienes las habitan".
El gasto, coste o inversión, en definitiva, no deja de ser un elemento positivo y que añade valor, según entiende también Carlos Sánchez: "Quien crea que la accesibilidad es costosa desde el origen del diseño está equivocado, en cuanto a las rehabilitaciones, el estudio indica que la adecuación / instalación de rampas y ascensores ocupan las dos primeras posiciones de las reformas acometidas o las que se quieren realizar. Ambos elementos constructivos tienen una incidencia clara en la accesibilidad de las viviendas. Valorar si el coste económico es considerable dependerá de diversos factores, entre los que se encuentran la solución constructiva, las ayudas públicas que se puedan recibir, el poder adquisitivo de la comunidad y, especialmente ¿puedo/podemos las personas que vivimos aquí “vivir” sin ello?".
Prisiones
Tal y como expone en sus inicios este estudio sobre vivienda (o prisión), "La vivienda es uno de los espacios en el que las personas pasan gran cantidad de su tiempo a lo largo del día y proporciona abrigo, privacidad y bienestar". Además, tener una vivienda digna y adecuada es uno de los derechos fundamentales de todas las personas. Y a pesar de todo esto, es un hecho que muchas personas son prisioneras en sus casas, con graves consecuencias para el desarrollo de sus propias vidas.
Y como es difícil sensibilizar ante la falta de conocimiento o experiencias o datos, este observatorio expone gran cantidad de ellos, evidencia con hechos una triste realidad y expone ejemplos sencillo y cotidianos que pueden ayudar a comprender un poco más la importancia de la accesibilidad: "la existencia de un ascensor amplio, para una persona usuaria de silla de ruedas es imprescindible, mientras que para cualquier otra persona será una facilidad, aportará más comodidad y será un extra de calidad del que se beneficiará igualmente en otro tipo de situaciones como el desplazamiento de un carrito de bebé, transportar la compra, maletas o bultos, etc. La instalación de un videoportero, siguiendo con el ejemplo, es también considerada como una mejora que incrementa el valor de la vivienda, precisamente por la misma razón por la que lo necesita una persona con discapacidad auditiva: por la seguridad de ver/saber quién llama..." y así en continuas situaciones del día a día de millones de personas.
"Hay pocas situaciones tan incongruentes como una vivienda que se convierte en prisión de las personas que la habitan. Nuestra vivienda, a priori símbolo de refugio, del lugar en el que nos sentimos libres, de calidez… puede transformarse en un espacio que impida el desarrollo vital de la persona... Las viviendas deben ser concebidas para ser usadas por todas las personas, con y sin discapacidad, jóvenes y mayores, madres con niños pequeños y personas que viven solas... que sea un lugar al que siempre queramos volver porque de él también podemos salir" (Miguel Carballeda Piñeiro, Presidente de ONCE y su Fundación)
