Desde el año 2000, CERMI-Aragón trabaja para articular y vertebrar al movimiento social de la discapacidad en una comunidad autónoma donde la despoblación, el envejecimiento y la dispersión geográfica de sus habitantes, en especial en el medio rural, son dos inconvenientes a la hora de garantizar una plena inclusión y promover un asociacionismo que aúne fuerzas en la defensa de los derechos de las personas con discapacidad.

 

Aragón es una comunidad que ha adolecido, durante años, de un menor desarrollo económico. Esto ha tenido como resultado una falta de infraestructuras y de medios que faciliten el acceso tanto a servicios de salud, de empleo, de accesibilidad, como de una mayor protección social, especialmente en el ámbito rural, por lo que el cometido que teníamos por delante era importante, teniendo en cuenta que la despoblación de sus núcleos rurales ha incidido aún más, si cabe, en ello. 

 

En estos años hemos estado trabajando con las distintas instituciones públicas para diseñar y coordinar estrategias y políticas que permitan un desarrollo digno de las personas con discapacidad sin importar el lugar donde residan, con especial atención en el ámbito rural donde más se concentra la población envejecida y con mayores patologías.

 

Los cambios demográficos experimentados en las últimas décadas en Aragón, con el envejecimiento y el aumento de la longevidad, han contribuido a un incremento del número de personas con discapacidad. Como se sabe, el envejecimiento acarrea más afectaciones y nuestra comunidad es de las más envejecidas de toda España y una de las que mayor tasa de población con discapacidad presenta (quinta comunidad autónoma más envejecida -INE 2015- y con un 9,19 % de personas con discapacidad –INE 2008-). 

 

Conseguir una mayor inclusión y una mayor participación de las personas con discapacidad en todos los ámbitos de la sociedad se ha convertido en uno de nuestros mayores objetivos, sin perder de vista una de los mayores mecanismos para conseguirlo: el empleo.

 

Para ello, hemos intensificado nuestra figura de interlocución con estamentos e instituciones públicas, así como con sindicatos y organizaciones patronales. Elaboramos propuestas, asesoramos a organismos públicos y privados, siendo representantes de todas las personas con discapacidad que vean mermados o denegados sus derechos.

 

Solo con el esfuerzo de todos y todas conseguiremos una plena inclusión y de calidad de las personas con discapacidad que vivimos y viven en nuestro país. Estamos seguros de que nuestras experiencias y la particularidad de nuestra comunidad aportarán puntos de vista diferentes, pero, que a su vez, se inscriben de una manera similar en otras comunidades autónomas y de las cuales aprenderemos enormemente de su ejemplo, para alcanzar de manera conjunta los objetivos planteados desde la red asociativa del CERMI.