"4,32 millones de personas con discapacidad,
más de 8.000 asociaciones luchando por sus derechos"
Entrevista
Carmen de la Rosa, nueva presidenta del CERMI Asturias
“Es fundamental para CERMI Asturias mejorar la interlocución con el Principado”
16/07/2021
Beatriz Sancho
Carmen de la Rosa, la nueva presidenta de CERMI Asturias, es una completa convencida y devota del movimiento de la discapacidad. Lleva más de diez años dedicada al asociacionismo particular del autismo y del trastorno del desarrollo, pero su talante, su actitud incansable y sus aptitudes, desde Plena inclusión Asturias, la han encauzado, en un brevísimo tiempo, hacia la plataforma general de la discapacidad. Aunque, con tierna humildad, confiesa disgustada no dominar aún el discurso global del CERMI, no puede encubrir su denotada autoexigencia, ni sus ganas de aprender y formarse, ni ese amor propio que le harán “bordar”, tal y como aspira, todas sus próximas entrevistas asumiendo siempre, eso sí, su reto más íntimo: “de los más vulnerables, defender todos sus derechos”.
Aterrizo en el escenario del autismo hace once años. Desde que entré a formar parte en la Asociación de Autismo de Asturias, Adansi, quise involucrarme. Era la mejor manera de aportar lo que pudiera. Entré enseguida en la junta directiva de la entidad, de presidenta, hace unos seis o siete años.
Hace aproximadamente cuatro, pertenezco a la junta directiva de Plena inclusión Asturias y en la última asamblea, el mes pasado, me nombraron vicepresidenta. Al ostentar esta entidad la vicepresidencia de CERMI Asturias, por la rotación de cargos y decisión del comité, Plena inclusión Asturias asumía la presidencia, y me designaron presidenta, sustituyendo así a Mónica Oviedo, de Cocemfe Asturias.
Mi relación con CERMI Asturias, por tanto, ha sido siempre a través de Plena inclusión Asturias y es, relativamente, muy reciente, con mi participación el año pasado en la comisión de Educación del CERMI autonómico como representante de Plena inclusión.
¿Y tu camino personal? ¿Cuándo y por qué te involucras con el movimiento asociativo de la discapacidad?
Tengo un hijo con autismo de 13 años y de ahí me introduzco en el mundo del movimiento asociativo. Desde el momento que tuvimos un diagnóstico dejé trabajar, me arremangué y decidí entenderme con un niño que “viene con un código de comunicación distinto”. Desde el primer instante, Adansi, la asociación, se convirtió en una tabla de salvación. Tengo mucha fe en el asociacionismo de la discapacidad, soy una completa convencida.
Y, ¿qué retos personales y asociativos te has propuesto desde esta nueva tribuna?
Lo estoy reflexionando, conociendo el funcionamiento de CERMI Asturias, de los cargos, adquiriendo el conocimiento de cómo es la dinámica de la organización, el día a día.
Tenemos un Plan Estratégico para 2021, que ya está redactado y aprobado por la Asamblea, que encaja perfectamente con mi idea de cómo tiene que funcionar un comité como el del CERMI a nivel autonómico. Necesitamos muchas cosas para mejorar, y es fundamental mejorar la interlocución con el Principado, este es el primer objetivo, que el gobierno nos escuche.
En este sentido, quizás la pandemia ha perjudicado esta comunicación con el gobierno asturiano. No sé cómo estaba CERMI Asturias antes, lo conozco ya en pandemia, luego no puedo hacer una valoración. Lo que sí me gustaría es dibujar un año que viene donde la interlocución con el Gobierno de Asturias fuera realmente productiva, para que las necesidades que estamos detectando se escuchen y se cubran.
El plan implica 40 puntos, pero lo esencial es lograr, por un lado, que la administración regional atienda las demandas de las entidades sin ánimo de lucro que trabajan con personas con discapacidad, y que as su vez garantice la sostenibilidad del este sector asturiano y, por otro, la puesta en marcha urgente de la acción concertada por estar ocasionando importantes pérdidas a las entidades que representamos.
Justamente hace unos días CERMI Asturias denunciaba la “precaria” situación de las entidades que gestionan servicios concertados dirigidos a personas con discapacidad, ¿qué habéis concluido al respecto en el Comité Ejecutivo de la entidad que celebrasteis hace unos días?
Urge realmente la puesta en marcha de la acción concertada cuyo retraso, precisamente, está ocasionando pérdidas a las entidades. Se trata de un acuerdo marco que se ha ido prorrogando con relación a las plazas concertadas, pero también hay una ley que no acaba de regular la acción concertada en Asturias. Este acuerdo marco prorrogado, con unos costes-plaza antiguos, no están cubriendo los servicios que estamos dando.
Las entidades están perdiendo dinero para poder dar los servicios de calidad que tienen contratados con la Administración. No son plazas privadas, son servicios contratados con el Principado de Asturias que, como no ha puesto en marcha la acción concertada con el precio acorde a 2021 y seguimos con prórrogas de acuerdos marco de años atrás, hace que las entidades que representamos no puedan asumir los costes reales. No hablamos de ganar dinero, sino no perderlo.
El Principado nos dijo que en enero de 2021 se iniciaba la acción concertada, y ahora en junio nos ha dicho que en septiembre. No podemos dejar que nos vayan posponiendo todo el tiempo. Las familias son las que están cargando con todo el coste y las pérdidas económicas. Somos entidades sin ánimo de lucro, pero en el momento que tengamos que asumir costes financieros recaerán sobre la entidad, y la entidad somos las propias familias.
Por eso es crucial la interlocución con el Principado, pero el presidente no sabe hacernos un hueco en su agenda, literalmente no nos recibe.
Ciertamente, por la pandemia, aún sigue siendo “difícil” la situación de muchas asociaciones, federaciones y plataformas que representan y trabajan por y para las personas con discapacidad y sus familias. ¿De qué modo, brevemente, ha castigado la pandemia a las personas con discapacidad que viven en Asturias?
La situación en Asturias fue muy lamentable porque, aunque no tuvimos la primera ola como sí la tuvieron otros lugares de España, sí tuvimos un encierro desde el 13 de marzo. Desde este momento, las entidades se quedaron sin saber qué iba a pasar, ni cómo íbamos a abordar los servicios esenciales, ni cómo poder pagar las nóminas de los empleados adscritos a esos servicios porque, oficialmente, lo que se nos dijo es que no se nos pagaba nada.
Quedamos en estado de shock. ¿Qué era aquello, el fin del mundo? Las entidades en Asturias lo pasamos realmente muy mal, dejamos de tener esa interlocución bien estructurada y vivíamos en el día a día esperando que nos dijeran que el Gobierno, por ejemplo, se iba a hacer cargo del pago de los PCR.
Vivimos una incertidumbre total incluso para asumir los costes de todos los materiales: mascarillas, EPIs, etc. Inicialmente nadie salió a decirnos nada, era un “arréglate como puedas”. Fue un trauma, no había sábados, ni domingos, era todo un continuo shock para enfrentar qué hacer con tanta gente a la que atender y lidiar con tanta incertidumbre.
Cuando llegó la negociación de la acción concertada a finales de 2020 nos pareció un alivio. Se dio después de salir a la calle a manifestarlo. En septiembre de 2020, toda la plataforma del Tercer Sector Asturias, no solo el CERMI, salimos a la calle porque se nos recortaba un millón de euros en subvenciones. Lo pasamos muy, muy mal el 2020, porque no encontramos un respaldo.
Pero esta negociación, a día de hoy, no se materializa. La situación que viven las entidades es de desasosiego, aunque mantenemos la esperanza de que la situación del retraso se deba a la dificultad en la gestión de los recursos. Tal y como estamos, no podemos seguir.
De hecho, CERMI Asturias ha denunciado que: “En estos momentos, se encuentran en una situación límite para mantener el movimiento asociativo de la discapacidad”.
Sí, hay muchas entidades que nos han trasladado que están literalmente asfixiadas, de ahí que lo hayamos hecho público. Y, aun así, hace unos días, hemos recibido la noticia del Principado, insisto, de que el presidente no nos puede recibir. Estamos en comunicación con la consejería de Servicios Sociales, pero desde esta consejería no se nos da ninguna respuesta. Nos derivan a septiembre, y no salimos del bucle.
El empleo quizás sea la mejor “vacuna” para la inclusión de las personas con discapacidad. CERMI Asturias ha propuesto mejoras para acceder al empleo público al Principado, ¿y el empleo ordinario para este sector poblacional asturiano? ¿Estás de acuerdo con la frase?
No descarto, para nada, que la frase sea acertada. Pero la Educación está antes que el empleo, sin descartar que el empleo es una clave. Si lográramos trabajo para todas las personas con discapacidad que están ahora mismo en sus casas, por supuesto que sería un paso adelante en inclusión, pero, ¿qué está pasando en los colegios?
¿Se les está dando de verdad el entorno inclusivo que necesitan, merecen y tienen derecho las personas con discapacidad? ¿Realmente estamos siendo capaces de dar la misma calidad educativa a este sector que al resto de alumnos y alumnas sin discapacidad? ¿O se nos están quedando atrás estas personas más vulnerables? Lo he visto durante la pandemia, y daba miedo. Los y las escolares con discapacidad se quedaron muy atrás en pandemia.
Dentro de esa reciente asamblea de CERMI Asturias, ¿podrías entresacar las nuevas propuestas, los objetivos abordables más inmediatos, nuevas reivindicaciones o en las que haya que seguir insistiendo, nuevos proyectos en los que queréis embarcaros o subrayar los más necesarios que ya existieran y que son cruciales para CERMI Asturias?
Nuevos proyectos no hay, desgraciadamente, por falta de financiación. Lo que intentaremos hacer es cambiar el funcionamiento para mejorar la situación que tenemos. Vamos a tratar de recabar más información y a colaborar mejor entre todos los miembros del comité, que ya se comunicaban muy bien, pero queremos intensificar nuestra unión porque es muy importante que las administraciones nos vean unidos y que remamos hacia el mismo objetivo, determinados a defender los derechos de las personas con discapacidad.
¿Cuáles son las necesidades más acuciantes de las personas con discapacidad, en general, en Asturias?
Los servicios que se ofrecen en Asturias para las personas con discapacidad son insuficientes tanto en el aspecto educativo, que hay muchísimo que mejorar, como en ámbitos sociales, culturales, de ocio, deportivos… Necesitan más espacios adaptados.
En Asturias también se necesita mayor accesibilidad universal. Es una de las prioridades. Aunque sí que se están haciendo cosas, no las suficientes, y eso limita la participación de las personas con discapacidad.
El empleo es otra de las necesidades acuciantes, claro, y también la presencia de la figura del asistente personal, una figura que en Asturias no está reconocida.
Desconozco todavía lo que puedan estar haciendo actualmente cada entidad. Plena inclusión Asturias sí que estaba pendiente de iniciar un servicio específico para mujeres con discapacidad intelectual.
No obstante, me parece fundamental favorecer a las personas con discapacidad en el entorno rural y, por supuesto, a las mujeres con discapacidad fuera y dentro de este ámbito. Han de tomarse medidas de discriminación positiva hacia las mujeres y niñas con discapacidad, y más en contextos donde son más vulnerables como el entorno rural.
Todo lo que sea fomentar recursos o acciones de apoyo a las mujeres con discapacidad, ya vulnerables de por sí, y más en entornos como el rural, más alejados de los recursos habituales que tenemos en las ciudades, bienvenidos sea.
Deberían, porque las mujeres y niñas con discapacidad son realmente el 60 por ciento de toda la población con discapacidad. ¿Te comprometerías en cermi.es semanal, dentro de tu presidencia actual, que imagino que serán cuatro años más, a llevar este asunto sobre la mesa de CERMI Asturias para lograr mejorar los derechos de las mujeres y niñas con discapacidad en Asturias y, especialmente, en el entorno rural?
Sí, sí, me comprometo porque los retos que más me gusta apoyar son, precisamente, aquellos que mejoren la situación de las personas más vulnerables. Ante los desafíos no me asusto, al contrario. Aunque también tengo que conocerlos, de ahí que me hubiera gustado haber hecho esta entrevista de aquí a un año, cuando sepa de todo lo que no sé ahora.
Pues quedas emplazada, Carmen.
Es que para poder hablar de mujeres con discapacidad en el medio rural querría tener toda la información para saber de qué hablo. Pero soy afín a su causa, y tengo el talante y la empatía hacia este sector poblacional, de hecho, de lo que conozco, sé que en Asturias hay muchas mujeres con autismo, con o sin discapacidad intelectual, que sufren lo que no está escrito. Como este terreno partiuclar sí lo domino, ¿cómo no me voy a vincular y comprometer como presidenta de CERMI Asturias con las mujeres y niñas con cualquier discapacidad en Asturias?
