"4,32 millones de personas con discapacidad,
más de 8.000 asociaciones luchando por sus derechos"
Entrevista
Pedro Luis García López, presidente de Acime (Asociación de Militares y Guardias Civiles españoles con Discapacidad)
“Queremos dinamizar nuestra actividad dando participación a los militares con discapacidad que están en el servicio activo”
02/02/2018
Blanca Abella - Imágenes: Jorge Villa
El intercambio personal es su mejor recuerdo de estas semanas de trabajo. En diciembre tomó posesión de la presidencia de Acime y desde entonces ha hecho un recorrido amplio de encuentros con personas. Explica que ha llegado hasta aquí gracias a su capacidad de resiliencia y a su espíritu libre de prejuicios y desea, sobre todas las cosas, dar un impulso renovador a Acime y sumar voluntades incorporando a la entidad a todos los militares con discapacidad que todavía ni siquiera saben que existe Acime.
Me empeñé en superar mi lesión de espalda visitando gimnasios, piscinas y fisioterapeutas, pero me cansé y decidí ver las cosas de otra manera. Pasé cinco años en el Conservatorio de Música con clases de piano, pero lo hice con la inocencia de un niño, sin prejuicios, de esa manera la capacidad de aprendizaje es mucho más plena. Y luego sentí la necesidad de volver otra vez a trabajar y comencé una formación orientada al autoconocimiento y al ‘coaching’ y fue excelente. Adquirí nuevas enseñanzas y perspectivas. Todas las personas tenemos cualidades diferentes y es importante descubrirlas.
Es un recorrido interesante y ajeno a lo habitual, ¿qué le han proporcionado estas experiencias?
No me arrepiento de esta trayectoria que me ha permitido ver la vida de otra manera, la experiencia y la formación que he adquirido en estos años y sobre todo por el afán de superación que toda persona tiene innata y necesita desempeñar. Descubrí, entre otras cosas, que la música aliviaba mis dolores y que tenía una memoria especial y recordaba con facilidad las partituras. Decidí dar el salto a otras capacitaciones por las que me sentía atraído, relacionado con los recursos humanos y ahí vino el coaching. Todo ello se lo debo a la resiliencia.
¿En qué sentido?
La resiliencia es algo natural en las personas pero si no son capaces de darse cuenta, pueden estar dando vueltas a un mismo problema sin encontrar la salida. La resiliencia es la capacidad de las personas de superar la adversidad y salir más reforzados y ese es el recorrido que he hecho pasando por distintas etapas, desde la música, el coach y esa es la necesidad natural del ser humano de seguir aprendiendo… sin toda esa formación, no estaría ahora aquí.
"Es difícil contentar a todo el mundo pero es necesario que nos marquemos un rumbo, saber dónde vamos y qué recursos tenemos"
¿Necesitaba Acime un nuevo presidente?
¿Hacia dónde va Acime?
Nuestra asociación se ha quedado envejecida porque nuestros asociados proceden en la gran mayoría del antiguo cuerpo de mutilados. Pero uno es tan viejo como piensa que lo es, como afirmaba McArthur. Tenemos nuestro pasado y nuestra historia, la respetamos, está ahí, pero seguimos caminando, queremos dinamizar nuestra actividad como asociación dando participación a un nuevo sector que está dentro de las Fuerzas Armadas, que son los militares con discapacidad que están en el servicio activo. Una realidad que yo tampoco conocía. Ese es el desafío que nos planteamos, dar nuevas oportunidades y sobre todo eliminar la brecha que puede existir entre una persona con discapacidad y otra que se presume que no tiene ninguna discapacidad y que están en una situación de cierta ventaja. Pero sobre todo que no haya prejuicios, de la misma manera que la mujer tuvo sus resistencias para ingresar en las Fuerzas Armadas.
¿Cree que en las Fuerzas Armadas hay prejuicios hacia las personas con discapacidad?
Las fuerzas armadas son modernas y están evolucionando mucho y favorablemente y en ese sentido tenemos que sentirnos orgullosos. Entré en las Fuerzas Armadas con 17 años, en 1978, y si nos ceñimos a esta etapa constitucional, la evolución de las Fuerzas Armadas ha sido muy notable y muy positiva.
"Lo que quizás podemos enseñar a las Fuerzas Armadas es que una situación de discapacidad no es calificativa ni inamovible"
O sea que los prejuicios existen, pero quizás ya en menor intensidad.
¿Ha sido bien recibido su impulso renovador en Acime?
Ha sido esperanzador y me he sentido muy bien acogido por los veteranos y las distintas facciones. Dicen que vengo tierno, sin ningún prejuicio. Y es cierto, casi sin ninguna referencia y con ganas de colaborar. Ha sido un año y pico muy intenso pero no lo cambio por nada, las experiencias que he tenido, las reuniones, pero sobre todo el intercambio personal, con personas.
Al igual que le ocurría a usted, habrá más militares retirados por discapacidad que no conozcan Acime, ¿ha pensado en alguna estrategia para darse más a conocer?
Ya estamos trabajando para dar a conocer la asociación con unas charlas divulgativas que queremos llevar a todas las unidades de los ejércitos. Necesitamos que nos conozcan, pero sobre todo necesitamos estar disponibles para que nos conozcan, no solamente decir quiénes somos, que somos una organización de referencia para las Fuerzas Armadas en materia de discapacidad y ese es nuestro objetivo, mantener ese estatus de referencia para las Fuerzas Armadas.
Pero además, se nos ocurrió que, de la misma manera que cuando un niño nace a los padres se les entrega un maletín del recién nacido, aquellas personas que tienen discapacidad y pasan a la situación de retiro se le debe entregar un maletín con todo lo que pueden hacer en formación, desarrollo personal, mundo asociativo…
¿Y cuentan con el apoyo de las Fuerzas Armadas para alcanzar los objetivos de Acime?
¿Cómo fue la experiencia?
Me sentí muy bien acogido y me sentí muy bien, es como si hubiese deseado toda mi vida estar ahí, sin saberlo. Me sentía en el lugar al que me gusta pertenecer, en esos asuntos de personal, en el ámbito de desarrollo personal.
El 77,8 por ciento de los militares con discapacidad está en edad laboral, según el 'Mapa de la Discapacidad de las FAS', ¿qué más desveló este documento y que uso harán desde Acime?
Precisamente este documento tuvo una presentación reciente, su elaboración fue una propuesta de Acime a Defensa y tiene como finalidad conocer la realidad social de estas personas, porque sentíamos la necesidad de llegar a todos los militares con discapacidad y tenemos dificultad para conseguirlo.
"Con una formación de este tipo se fomenta el autoconocimiento y cuando una persona comienza a conocerse, se empodera"
En ese mismo terreno laboral, Acime ha puesto en marcha un programa de empoderamiento y empleabilidad, ¿cómo es dicho programa y qué acogida ha tenido?
Como usted afirma, la mujer sufrió importantes resistencias para formar parte de las Fuerzas Armadas, ¿cree que es necesario impulsar algún tipo de iniciativa para contar con su presencia también en Acime?
Simplemente contar con ellas. Ahora mismo una mujer forma parte de la junta directiva y mi deseo es que participen y se integren como uno más. En mi caso personal, debo decir que estoy aquí por una mujer, fue ella, la presidenta de la Delegación de Aragón-Rioja, Silvia Marín,quien me dio a conocer Acime colocando un cartel en un sitio visible, al que llegué yo. Y ella fue también quien me sacó de mi círculo de confianza, me llevó a conocer más este mundo. Y me dejé llevar y empecé a conocer unidades de tierra, que no conocía, visitas al mando regional del ejército del aire, y a partir de ahí se precipitó todo y finalmente le dije, si queremos que cambien las cosas, tenemos que estar en Madrid.
