"4,32 millones de personas con discapacidad,
más de 8.000 asociaciones luchando por sus derechos"
Entrevista
Paco Vañó, delegado del Patronato de la Fundación Bequal para las relaciones institucionales
“Entiendo que una empresa tiene que tener beneficios y el sello Bequal prestigia a la empresa y además mejora su resultado mercantil”
27/04/2018
Blanca Abella - Imágenes: Jorge Villa
Salir a la calle y hablar con la gente le gusta, le divierte y le mantiene activo y es una de las razones que le impulsó a asumir un nuevo reto como delegado del Patronato de la Fundación Bequal para las relaciones institucionales. Otra de las razones es que cree en Bequal y en los beneficios que aporta a la discapacidad, “y la bandera de la discapacidad siempre la llevo puesta”, asegura Vañó. En este nuevo recorrido, allá donde va habla de Bequal y explica de manera rotunda la importancia de su sello y el valor de las 3R que le acompañan: responsabilidad, reconocimiento y rentabilidad.
Siendo diputado y portavoz de la Comisión de la Discapacidad me invitaron a participar como Patrono en Bequal y acepté. Siempre me he dedicado a temas de discapacidad, desde una posición o desde otra, en lo privado, lo público y me pareció que era una buena labor y podía ser compatible con el ejercicio como diputado. Al principio entramos tres diputados (Carles Campuzano, Ramón Jáuregui y yo), pero era solo como patrono, una labor de representación y poco más y en esta última legislatura, que no salí como diputado, presenté la dimisión del patronato por considerar que estaba condicionada a mi cargo en el Congreso, pero me dijeron que siguiese, incluso el presidente del CERMI me propuso colaborar de manera más estrecha y dije que sí, me pareció muy buena idea.
¿Qué significa el cargo actual, esa nueva responsabilidad como 'Delegado del Patronato de la Fundación Bequal para las relaciones institucionales?
Primero empecé asistiendo un poco a la labor del presidente del CERMI cuando él no podía hacerse cargo, pero mi tarea, además de promover, difundir y hablar de las excelencias de Bequal y de su sello, en la medida en que tengo algunas relaciones institucionales, es ayudar a introducirlo, a que se conozca y tratar de buscar gente, organismos, entidades que vean su utilidad, que vean que la responsabilidad social corporativa tiene el retorno famoso de las 3R: Responsabilidad, reconocimiento y rentabilidad. Explicar que es un acto responsable porque cubre una función que hay que hacer y a través de la responsabilidad se consigue rentabilidad, porque una empresa responsable es más atractiva de cara a los clientes. Y el reconocimiento favorece a la empresa en su imagen de seriedad y compromiso.
¿Y qué acciones y encuentros está organizando en esta nueva aventura?
De momento, lo que se debe exigir a las empresas con más de 50 trabajadores es que cumplan con su obligación del 2%, pero hay que hacerles ver que eso no se debe hacer solo por legislación sino que puede tener un retorno de mejora, ya sea en reputación o en rentabilidad. Quizá la rentabilidad es la que más me gusta a mí porque tengo unos orígenes mercantiles, he sido empresario y entiendo que una empresa tiene que tener un beneficio. Tener este sello prestigia a la empresa y mejora incluso su resultado mercantil.
¿Cómo cree que ha sido el desarrollo de la responsabilidad social corporativa en nuestro país? En el aspecto medioambiental tiene ya un largo recorrido y las empresas que lucen sus sellos de conformidad gozan de gran acogida, incluso socialmente, ¿queda mucho para lograr ese reconocimiento en la responsabilidad social corporativa en Discapacidad?
Efectivamente, en el mundo de la alimentación cualquier producto ecológico parece que tiene más valor, incluso se acepta mejor que sea más caro, porque ha habido un reconocimiento social y una creencia sobre la mejora del producto. Esa percepción social habría que trasladarla a la discapacidad. Las personas con discapacidad no somos mejores ni peores, somos uno más, pero lo curioso es que necesitamos demostrar que esa discapacidad no nos condiciona y a veces, incluso, te empleas más a fondo. Esa es la pretensión, ponernos al nivel del ecologismo.
¿Y no resulta extraño que se reconozca más y mejor la aportación al medio ambiente que a las políticas de inclusión con las personas?
¿Qué alianzas serían necesarias u oportunas para lograr una mayor difusión del Sello Bequal?
Todo el mundo debería poner de su parte, incluso las empresas que ya han logrado ese sello, hacer más publicidad de ese reconocimiento y difundir ese prestigio, lucirlo. Acciona, Gas Natural, Price Waterhouse, Ernst & Young, Pelayo, La Caixa, Asepeyo, Fremap… además no son empresas menores y cumplen muy bien su compromiso, y la exigencia para lograr el sello es muy alta. Hagamos que se vea ese sello y se desee como garantía de éxito, de calidad y compromiso. Lo que hay que hacer ver es que es socialmente responsable, rentable y reputable.
¿Qué sentido tiene para la Administración pública la responsabilidad social?
Al formar parte del Gobierno del Estado, la Administración tiene que cumplir las propias leyes que emanan del Congreso y es la primera que tiene que dar ejemplo. Pero lo que siempre digo es que en la medida en que piensas en soluciones para las personas con más dificultad, resuelves para todos y el ejemplo para ilustrarlo es siempre el mismo, muy manido: Por una rampa pasamos todos, pero por unas escaleras yo no paso.
Creo que también tenemos que persuadir a la Administración para que reconozca la utilidad de este sello y al ir respaldado por la Administración, el sello tendrá mejor imagen. Entre los patronos tenemos representantes de las administraciones públicas y esa función podrían hacerla, facilitar esa difusión del prestigio del sello y reconocer su valía. Tenemos que empezar desde dentro a impulsar esa difusión, a mostrarlo y prestigiarlo. Por mi parte, allá donde voy, hablo del sello y muestro sus bondades y beneficios, voy con esa matrícula puesta: ‘Soy patrono de Bequal y me dedico a promocionar este sello’.
