"4,32 millones de personas con discapacidad,
más de 8.000 asociaciones luchando por sus derechos"
Reportaje
Servicios Sociales de la ONCE
Primero las personas
12/02/2014
Blanca Abella
71.769 afiliados de la Organización Nacional de Ciegos de España reciben una atención continuada de 1.700 personas que trabajan en los servicios sociales de la ONCE. Cuando un afiliado comienza su alianza con esta entidad, se pone en marcha un engranaje casi perfecto en el que participan psicólogos, trabajadores sociales, técnicos de rehabilitación e instructores de tiflotecnología y braille, además de otros profesionales. El objetivo, el bienestar y la autonomía personal del afiliado.
El recorrido comienza una vez que se logra la afiliación a la ONCE, tal y como explica Patricia Sanz, Directora General Adjunta de Servicios Sociales para Afiliados: "Se hace una acogida a los nuevos afilaidos en el centro ONCE más cercano a su lugar de residencia, pero en grupos pequeños en cualquier caso, donde se les explica qué es la ONCE y qué servicios prestamos en general, porque en ese momento procuramos no avasallar, ya que somos una entidad muy grande y ofrecemos muchas cosas y para empezar seguramente necesitan solo tres".
El siguiente paso es la cita con el trabajador social, que mantiene una entrevista individual y en profundidad con el afiliado. Es el momento de evaluar y detectar sus necesidades para que luego el gestor, en función de lo que ha valorado el trabajador social, designe un coordinador de caso, que será uno de los profesionales de atención directa, en función del que vaya a atenderle más tiempo o de forma más intensiva. "Casi siempre es el técnico de rehabilitación porque lo más prioritario para alguien que no ve o ve poquito es desenvolverse en un mundo que no ha cambiado a priori pero donde no le sirven las estrategias que tenía hasta ese momento. Lo prioritario suele ser el manejo del bastón, o bien ayudarle a etiquetar en su domicilio electrodomésticos, que hoy en día son casi todos táctiles o digitales", afirma Patricia Sanz.
Con los niños y jóvenes se hace mucho hincapie en el acceso a las nuevas tecnologías ya que aportan grandes beneficios a las personas ciegas y facilitan en gran medida el acceso y la autonomía en aspectos variados de sus vidas, tal y como muestra Ana Díaz con una simple afirmación, entre risas: "Si llego a tener mi iphone cuando estaba en la facultad, habría sacado la carrera en dos años en lugar de cuatro".
Las personas mayores, sin embargo, no entienden que puedas hacer la compra por Internet, porque no la han hecho nunca y no lo contemplan, hay que enseñarles a hacer la compra y pedir ayuda si la necesitan.
Las mismas razones expone Patricia Sanz al hablar de la diferencia entre los afiliados y sus necesidades: "El objetivo fundamental en cualquier edad es la autonomía, cuando son niños lo trabajamos con ellos y con las familias, porque a veces les condiciona mucho el sentimiento de protección, por eso cuanto más pequeño es más importante trabajar también con la familia, durante toda la etapa educativa. Por otro lado, tenemos una población de afiliados que en el 44 por ciento son mayores de 55 años, que es un reflejo de la población española. Y cuanto mayor es alguien, y la esperanza de vida va creciendo, más probabilidades tienen de ver poco y mal, y eso hace que el perfil de afiliados sea mayor. Y aunque sea mayor y tenga su vida totalmente estructurada y hecha, y no busque trabajo, es igual de importante que en su barrio, en su casa, en su entorno, tenga autonomía para hacer sus cosas, con o sin ayuda, lo que quiera, pero que tenga autonomía. También el sentimiento de protección vuelve con la edad y eso hay que atenderlo".
El sentido de la ONCE
Estos servicios sociales no son la principal tarea de la ONCE, son su razón de ser, como explica Patricia Sanz: "La razón de ser de la ONCE es la prestación de servicios sociales a personas ciegas o con resto visual, por eso la gente nos compra, por eso tenemos la concesión y licencia para vender productos de juego, de hecho somos la única entidad en España. Gracias a eso, tenemos una entrada de ingresos, que es la que nos permite hacer más o menos cosas en el área de servicios sociales".
La estructura de estos servicios tiene su eje principal en la central de Servicios Sociales, donde no llevan la atención directa, pero de la que dependen 22 centros directivos, que son delegaciones territoriales y están repartidos por toda la geografía española. Además, hay cinco centros de recursos educativos, que se reparten España en cinco zonas y que atienden a los más de 7.600 alumnos que hay en todo el país. 
Además, existe un servicio de producción bibliográfica que adapta a sonido, a braille cualquier obra educativa, cultural o de ocio que alguien necesita. La sede principal está en Madrid pero hay otra en Barcelona además de varios profesionales repartidos en parte de los equipos de servicios en toda España.
Y está también el centro de investigación y desarrollo tecnológico, el CIDAT, que está en Madrid, que presta servicios a profesionales y afiliados de toda España.
La ONCE tiene un modelo único de prestación, asegura Patricia Sanz: "Porque da igual que el afiliado esté en Huelva o en Santiago de Compostela, tiene que recibir los mismos servicios, con la misma agilidad y a través de los mismos profesionales".
Así lo entiende también Ana Díaz: "En Castilla-La Mancha hemos hecho un esfuerzo tremendo por controlar y medir la atención en cantidad y tiempo, y los indicadores que tenemos en lista de espera, en la mayoría de los servicios no supera el mes, que me parece bastante razonable".
En definitiva, en los servicios sociales de la ONCE trabajan "para que la gente sea lo más independiente posible y esté lo más integrada posible, desde la parte educativa, donde empezamos, hasta el resto de su vida, en actividades de ocio y acceso a la cultura. Están para siempre", sentencia Patricia Sanz.
Todo vale
Son muy bien valorados todos los servicios, asegura Patricia Sanz: "El nivel de satisfacción es muy alto, además tenemos muy buenos profesionales, y los afiliados reciben muy bien esa ayuda porque realmente adquieren estrategias para desarrollarse con la mayor normalidad posible en su vida diaria".
Hay dos servicios que están muy bien considerados y de gran importancia, el de la educación, todo el apoyo y la adaptación del material, y también la ayuda en las habilidades sociales. Cuando acaba la etapa educativa, además, es fundamental la orientación prelaboral.
En Castilla-La Mancha, según los indicadores de los últimos meses, el servicio más valorado o más demandado es el de rehabilitación, y depués el acceso a la comunicación (móviles, ordenadores, etc.), el apoyo psicosocial y el apoyo al bienestar.
Lo que se ha logrado actualmente, tras 75 años de trabajo de la ONCE, es que la sociedad reconozca a las personas ciegas como uno más: "La sociedad está muy sensibilizada en general en España, para bien. Las personas ciegas tienen mucha presencia en la calle, mucha autonomía y un concepto de validez en sí mismas, y esto está fenomenal", explica la responsable de los servicios sociales.
Ana, ciega y usuaria de los servicios sociales de la ONCE cuenta su experiencia: "Hace 30 años tenías que ir pidiendo permiso casi y ahora esa parte está muy superada, pero siempre quedan pequeños detalles que la gente no controla y el mundo de la ceguera es muy desconocido y muy temido a la vez y a veces la gente no sabe qué hacer contigo y se sienten muy nerviosos, y también piensan que eres una superwoman por todo lo que haces, y no es para tanto. Hay muchas cosas que están muy avanzadas pero nos queda un día a día duro y constante".
Además, en estos tiempos de crisis, con las reducciones sufridas en muchos servicios públicos, en la ONCE han notado una mayor demanda de servicios sociales que antes no cubrían, y los afiliados llegan con más precariedad económica y menos apoyo público. "Ingresamos menos, pero damos más y a más gente. Ese equilibrio es complicado", añade Patricia Sanz.
La misma sensación perciben en Castilla-La Mancha: "Aquí ha sido tremendo, porque cuando empezó la atención a la dependencia, esta comunidad fue una de las que más rápidamente empezó y con gran aportación económcia, prestaciones y servicios, pero desde hace dos años ha habido un cambio como de la noche al día", explica Ana Díaz.
Catálogo de Servicios y Prestaciones
Se estructuran en cinco modalidades (atención personal, prestaciones, actividades colectivas, recursos materiales y programas complementarios).
1. Atención personal
- Apoyo psicosocial (la persona, y su familia si es necesario, analizan las implicaciones emocionales de vivir con la ceguera o la deficiencia visual, ayudándole a buscar soluciones y estrategias para afrontar y aceptar de manera adaptativa tales situaciones y cambios)
- Rehabilitación (se entrena y forma a la persona en habilidades y técnicas que le posibiliten llevar a cabo de la forma más segura y autónoma posible su desplazamiento en diferentes entornos (domicilio, centro de trabajo o estudio, barrio, centros comerciales, transporte público, etc.), utilizando diferentes auxiliares de movilidad tales como ayudas ópticas y electrónicas, bastón blanco o perro-guía; así como la ejecución de las actividades de la vida diaria (higiene y arreglo personal, comer, limpiar la casa, cocinar, planchar, poner la lavadora, etc.)
- Comunicación y acceso a la información: Tiflotecnología y Braille (formación en el manejo de las tecnologías de la información adaptadas para personas con ceguera y deficiencia visual, conocidas como ayudas tiflotécnicas, con el fin de posibilitarles y facilitarles la utilización del ordenador, la navegación por internet, el manejo de programas informáticos, etc.)
- Atención educativa (para que el alumno con ceguera o deficiencia visual pueda seguir el currículo académico oficial común para todos los estudiantes, se proporcionan al centro escolar, al propio alumno y a su familia apoyos variados: Asesoramiento al Centro y al profesor, facilitación al alumno de experiencias directas de aprendizaje en ámbitos específicos relativos a desplazamiento, habilidades para la vida diaria, braille, tiflotecnología, habilidades sociales, Ocio y tiempo libre, orientación profesional, asesoramiento y orientación familiar, provisión de recursos adaptados)
- Apoyo al empleo (asesoramiento vocacional y profesional que le permita fijar un itinerario profesional personalizado; su adecuada capacitación profesional, mediante formación y facilitación de prácticas para el empleo; así como la gestión de su demanda de empleo con las correspondientes ofertas laborales)
- Ocio y tiempo libre (motiva a la persona hacia la ocupación creativa y satisfactoria de su tiempo libre y de ocio: bibliotecas braille y audio, audiodescripción, actividades recreativas y deportivas específicas, etc.)
- Apoyo al bienestar social (garantiza a los afiliados unas condiciones elementales de calidad de vida y de acceso a los recursos básicos o esenciales de la comunidad: prestaciones económicas, residencias, etc.)
2. Prestaciones
Pueden ser de tipo económico y material.
Las económicas están orientadas a conseguir en los afiliados unas condiciones de vida dignas en sus aspectos más básicos (ingresos económicos, vivienda, ayuda a domicilio, etc.) (“Prestaciones para la mejora del bienestar social”); el acceso a recursos sociales y comunitarios esenciales para su rehabilitación (asistencia a programas de rehabilitación) y autonomía personal (por ejemplo, adquisición de material especializado) (“Prestaciones favorecedoras de la autonomía personal”); la atención educativa correspondiente (cobertura de gastos de matriculación, material didáctico, alojamiento, manutención, intervenciones psicopedagógicas, etc.) (“Prestaciones al estudio”); el acceso al empleo (ayudas para la participación en actividades formativas o la realización de prácticas laborales, así como para el desarrollo de proyectos de autoempleo, etc.) (“Prestaciones para el empleo”).
Las materiales adoptan la forma de concesión, en régimen de préstamo, de dispositivos especializados (línea braille, anotador parlante, sintetizador de voz, ampliador de caracteres, etc.), con el fin de posibilitar a los afiliados la realización de unos estudios (“Adaptaciones del puesto de estudio”) o el desempeño de una actividad laboral (“Adaptaciones del puesto de trabajo”).
3. Actividades colectivas
Pretende desarrollar las inquietudes de ocio, culturales, artísticas y deportivas de las personas con ceguera o deficiencia visual mediante las siguientes acciones
- Promoción de grupos de teatro y música
- Programación de diferentes actividades culturales y recreativas tales como conferencias, exposiciones, talleres, excursiones, deporte de base, etc., dentro del programa de “Animación Sociocultural y Deportiva”
- Organización de diferentes turnos vacacionales para todos aquellos afiliados y pensionistas mayores de 55 años
4. Recursos materiales
Investigación, desarrollo, producción y distribución entre los afiliados de diferentes productos, dispositivos y ayudas que les faciliten el acceso a la información escrita, a determinadas manifestaciones culturales o al entorno en general:
- Servicios y productos bibliográficos
- Audiodescripción
- Ayudas técnicas
5. Programas complementarios
Refuerzan la actuación de los anteriores servicios o prestaciones para determinados colectivos: afiliados con sordoceguera; personas dependientes o mayores; información y orientación sobre pronóstico familiar a los afiliados con patologías oculares hereditarias.
