
"4,32 millones de personas con discapacidad,
más de 8.000 asociaciones luchando por sus derechos"
Tercer Sector
La asfixia financiera del Tercer Sector es una amenaza para los derechos sociales, según el CERMI
01/10/2020
La creciente fragilidad financiara del tercer sector, su casi asfixia, es una amenaza cierta para el mantenimiento y extensión de los derechos sociales, la inclusión y el bienestar ciudadano; sin organizaciones sociales con solidez económica, el cambio social se ralentiza y puede quedar paralizado.
Para el responsable del CERMI, la sostenibilidad económica del tercer sector es una cuestión no resuelta, que introduce tensión y hasta dramatismo en la gestión de las organizaciones sociales, que pierden presión reivindicativa, propositiva y de incidencia, al tener que encarar permanentemente su propia continuidad y hasta su supervivencia.
Respecto de la financiación pública del Tercer Sector, el dirigente del CERMI ha indicado que será decreciente, irá a menos, como se ha visto desde la crisis económica de 2008 y la pandemia actual, pues los poderes públicos no desean un sector social robusto y exigente que accione y presione para desplegar una agenda social de cambio potente.
Ante este hecho, para el presidente del CERMI, el Tercer Sector no puede resignarse, ha de ser creativo y audaz en términos de sostenibilidad y acceso a recursos y afrontar y hacer aflorar otros horizontes de financiación. Así, ha apuntado, la internacionalización, la convergencia entre entidades, la cooperación con las empresas y otros agentes económicos, son vías que hay necesariamente que transitar, en opinión de Pérez Bueno.
La organizaciones cívicas no desean ser sostenibilidad económicamente para ser más fuertes o gestionar más cómodamente, sino para precipitar su alta tarea de transformación del entorno con mirada social y de inclus