
"4,32 millones de personas con discapacidad,
más de 8.000 asociaciones luchando por sus derechos"
RSC
La educación financiera posibilita la vida independiente de las personas con discapacidad intelectual
04/10/2015
El desarrollo de una vida independiente por parte de las personas con discapacidad intelectual, o con dificultades de aprendizaje, no es posible sin una educación e inclusión financiera adecuada.
Los participantes también hicieron énfasis en el papel que juega la educación. Así se puso de manifiesto cómo con la última reforma educativa se ha incluido en el curriculum escolar la materia de "comprensión financiera".
Fernando Tejada destacó cómo desde los reguladores, tanto Banco de España como la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), se puso en marcha el proyecto "Finanzas para todos" a través del cual se trata de canalizar y ofrecer distintos recursos gratuitos que pueden ser usados para mejorar la educación financiera de la sociedad.
En este sentido, el representante del Banco de España destacó la importancia de colaborar con las entidades del tercer sector y de los distintos colectivos con el objetivo de conocer cuáles son sus preocupaciones y poder de esta forma atender a las demandas. Así, la celebración del Día de la Educación Financiera quiere servir de base para la puesta en marcha de una red que permita llegar al mayor número de personas posibles.
Por su parte, Teresa Palahí incidió en la necesidad de compartir conocimiento y lograr la inclusión de las personas con discapacidad en todos los ámbitos de la sociedad. Además, el desarrollo de las herramientas de formación no sólo pueden ser aprovechas por las personas con discapacidad intelectual sino por todos aquellos colectivos de personas que tengan dificultades de aprendizaje.
Julio Carlavilla hizo hincapié en que las entidades financieras deben de trabajar y desarrollar proyectos que tengan un impacto real en la sociedad. También aseguró que las políticas de responsabilidad social corporativa que desarrollan las entidades financieras deben ser una extensión de los objetivos de los mismos.
La directora del CERMI, Pilar Villarino, resaltó cómo el desarrollo de herramientas tecnológicas debe estar al servicio de la supresión de barreras. Así, todo aquello que se desarrolle para fomentar la educación financiera debe estar pensando para las personas con discapacidad.
Por último, Laura Avendaño puso de manifiesto los beneficios que tienen los programas e iniciativas de educación financiera en las personas con discapacidad, que ganan en independencia, autoestima e integración social. Estos términos quedaron refutados con la experiencia de Raquel Carcamo.