"4,32 millones de personas con discapacidad,
más de 8.000 asociaciones luchando por sus derechos"
Reportaje
Requerimientos de accesibilidad de las personas con sordoceguera
Respuestas insuficientes a demandas complejas
30/09/2017
Blanca Abella
La accesibilidad de las personas sordociegas está en cuestión desde el primer paso que dan en su discurrir diario. La sordoceguera no se puede abordar como la suma de dos discapacidades, sino como la combinación de ambas, de ahí que requiera un tratamiento distinto, una adecuación a una realidad en la que dos deficiencias sensoriales multiplican e intensifican el impacto de cada una, creando una discapacidad severa, diferente y única. Por eso, la sordoceguera debe ser atendida de manera específica, con servicios especiales y profesionales reconocidos. La movilidad y la comunicación deben ser adaptadas de manera especial para lograr una inclusión social que está muy lejos de ser real.
Algunas personas sordociegas son totalmente sordas y ciegas, mientras que otras tienen restos auditivos y/o visuales. En todo caso, el efecto de incomunicación y desconexión con el mundo que produce la combinación de ambas es tal, que la persona sordociega tiene graves dificultades para acceder a la información, a la educación, a la capacitación profesional, al trabajo, a la vida social y a las actividades culturales. De ahí que la sordoceguera deba entenderse como una discapacidad en sí misma que requiere métodos especiales de comunicación y métodos especiales para hacer frente a las funciones de la vida diaria.
Una discapacidad en sí misma
Es por eso por lo que, según confirma Trigueros, "nuestra gran lucha ha sido y sigue siendo la aprobación de una legislación que reconozca nuestros derechos". Para empezar, esa norma debe reconcoer la sordoceguera como una discapacidad con entidad propia y debe regular, por lo tanto, unos servicios especializados y la figura de personale specíficamente formado para su atención, así como métodos especiales de comunicación para hacer frente a las actividades de la vida diaria.
Las prioridades para este colectivo son los servicios de guía-intérprete y el de mediador en la comunicación, "dos profesionales que garantizan la accesibilidad tanto a la comunicación como al desplazamiento", explica el presidente de Fasocide.
Sin embargo, estos servicios no son suficientes para lograr la autonomía de estas personas. Según Trigueros "existen muchos frentes abiertos en los que trabajar para alcanzar nuestra autonomía". Y enumera y explica los siguientes:
- Sensibilizar y hacer conocedora a la sociedad de la existencia de nuestro colectivo y de nuestra idiosincrasia, para evitar trabas como pueden ser; predisposición a la no comunicación o a la no ayuda por el simple desconocimiento, privar el acceso a transporte público; como en los aeropuertos, y un largo etc.
- Garantizar la accesibilidad online de los trámites de cualquier entidad o institución pública a través de línea braille.
- Accesibilidad vial: difusión y conocimiento del colectivo para que sepan identificarnos y facilitarnos la ayuda si es necesaria, como por ejemplo saber que el bastón rojo-blanco es identificativo de las personas sordociegas. Y en el caso de los semáforos, planteamos la necesidad imperante de adaptación táctil a la información auditiva/visual existente, ¿cómo? Mediante sistemas de vibración por los que podríamos acceder a mucha de la información vital de nuestro entorno como podría ser en el caso de los semáforos. Ejemplo: si está en verde, dos vibraciones cortas, si no podemos cruzar porque está en rojo; vibración continuada.
- Accesibilidad a la información televisiva: Contar con subtitulado en todos los canales y en todos sus programas y películas es vital para todos nosotros, para estar en igualdad de condiciones con el resto de la sociedad y recibir la información actual sobre lo que ocurre a tu alrededor, así como el mismo derecho de poder compartir tiempo de ocio viendo la televisión en tu hogar con tu familia o amigos.
- Servicio de Emergencias: la creación fundamental de un servicio especial para las personas Sordociegas en diversas situaciones de emergencias (policía, urgencias, guardia civil, bomberos) mediante el cual puedan localizarnos y saber que ese número de teléfono corresponde a una personas Sordociega y requiere de una atención específica.
Participación y tecnología
Cada persona sordociega es un mundo, pero todos ellos comparten una misma necesidad, una inquietud natural por saber qué ocurre a su alrededor, un deseo de participar del mundo, conocer la información que les rodea y el contexto en el que se desarrolla y así, "poder tomar decisiones por nosotros mismos", expresa Francisco Trigueros.
A su juicio, no son demandas complejas, "puesto que hablamos de cumplir con la ley y la normativa en vigor, hablamos de velar por los derechos humanos, y en cuanto a estos derechos no podemos dejar a nadie atrás o en una posición inferior que no le permita disfrutar de una vida plena".
Aunque sí reconoce que puede existir cierta complejidad a la hora de sensibilizar y concienciar a la sociedad, "ya que se necesitaría un largo recorrido en el tiempo para llegar a todos los actores que participan en la misma".
Por otro lado, lo que también valora, y de manera positiva, es la fuerte presencia de las nuevas tecnologías y su rápido evolución: "es un gran aliado para nosotros y debe seguir siendo si se continúa investigando y apostando por este campo; está demostrado que la llegada de las nuevas tecnologías, como lo fue con Internet y los smartphone, supusieron una revolución en cuanto al acceso a la información y comunicación inmediata para las personas sordociegas".
Y como muestra, Trigueros comenta un caso, tan solo uno, en la amplia gama de posibilidades que ofrece actualmente el desarrollo de apps y otras tecnologías actuales: "tecnologías que son revolucionarias para nosotros como la APP GoAll, que por primera vez en la historia ha supuesto la eliminación de la barrera al acceso a la cultura y ocio televisivo, mediante una aplicación que pasa el subtitulado en texto a la línea braille".
Servicios necesarios
Las barreras que afrontan las personas sordociegas no son solo aquellas que afectan a la comunicación con los demás, sino también las que corresponden a la comunicación con el entorno, saber qué está pasando alrededor.
Por lo tanto, las personas Sordociegas tienen necesidades y requieren servicios específicos que las contemplen y la coordinación de los programas individualizados es fundamental para ellas. Dentro de esta perspectiva, los servicios que se necesitan básicamente, según Fasocide, son:
Comunicación
Un sistema puede ser más apropiado para un individuo u otro, pero no obstante, es esencial la enseñanza del mayor número de métodos de comunicación posible, para tener la posibilidad de comunicarse en el mayor número de situaciones posibles.
Rehabilitación
Programas de rehabilitación: orientación y movilidad, actividades de vida diaria, vida independiente, que incluyen, entre otros aprendizajes: el uso del bastón, el manejo del dinero, manejo de la casa y cocina, compras, comunicación con el público, sistemas para obtener información del entorno, etc.
Apoyo psicológico
Aceptación de la discapacidad, ajuste a la sordoceguera y desarrollo de actitudes positivas.
Medios técnicos y tecnológicos
Uso de avisadores de sonidos ambientales, alarmas, dispositivos para la comunicación presencial y a distancia, uso de ordenadores, tablets y smartphones convenientemente adaptados para ser accesibles desde las características de su discapacidad y poder acceder a todas las posibilidades de comunicación y acceso a la información que ofrece Internet, etc. Aprendizaje de tecnologías específicas y de apoyo que nos ayuden a una mayor integración y aumentar las posibilidades de comunicación e interacción con el entorno.
Educación
Adaptación curricular, mayor tiempo para la formación, atención temprana del niño sordociego. Completar o continuar la educación y mantener la independencia, acceso a otros programas de formación y a la educación superior.
Formación pre-vocacional, vocacional y empleo
Formación laboral y colocación. La rehabilitación de una persona sólo puede terminar cuando ésta se integra plenamente a nivel laboral y social. Adaptación del puesto de trabajo, etc.
Servicios de apoyo
Guías-intérpretes, mediadores y voluntarios.
Alternativas de residencia
Según los casos, necesitarán alternativas residenciales, como: pisos tutelados, vivir en apartamentos con apoyo, vivir en la comunidad independientemente, etc.
Ocio y tiempo libre
Actividades socioculturales. La población sordociega vive muy dispersa y tiene muy pocas oportunidades para interactuar entre ellos y con sus semejantes. El contacto y las actividades entre ellos mismos contribuirá al desarrollo de su propia identidad y en la eficacia del programa de rehabilitación.
Las personas Sordociegas necesitan la recreación y la interacción como cualquier otro grupo social.
En conclusión, las personas Sordociegas tienen necesidades especiales y su futuro dependerá de la calidad y la cantidad de los servicios que permitan cubrir estas necesidades básicas.
Durante la IV Conferencia Mundial de Hellen Keller, celebrada el año 1989 en Estocolmo (Suecia) se redactó y se aprobó el texto de las NECESIDADES BÁSICAS DE LAS PERSONAS SORDOCIEGAS.
