¿Con qué idea nació la corporación empresarial de la ONCE?

 

Al crear la corporación empresarial, la ONCE tiene dos objetivos, lograr una fuente de ingresos complementaria al cupón y por otro lado, crear empleo para afiliados a la ONCE. En sus comienzos, hace muchos años, se crean empresas de distintos sectores, pero con el paso del tiempo y con la llegada de la crisis se da un enfoque distinto. Así, actualmente existe el compromiso de incrementar la relación con Fundosa, con el objetivo de crear empleo para personas con discapacidad en general. Fundosa sigue siendo un grupo más social, puesto que no persigue únicamente maximizar el beneficio. CEOSA, por su parte, sí lo persigue, pero al mismo tiempo buscamos crear empleo para afiliados y para el resto de personas con discapacidad. Comenzamos una nueva época en la que a pesar de la crisis, se crea empleo masivo para personas con discapacidad.

 

¿Se han cambiado también las líneas de negocio?

 

Más que las líneas, creo que lo que ha cambiado es la filosofía, los objetivos. Antes la creación de empleo para personas con discapacidad no era prioritaria en la corporación, pero desde hace dos años está presente de una forma más intensa. De hecho, en estos últimos 24 meses hemos conseguido crear más de 1.000 empleos para personas con discapacidad, en plantilla. 

 

Es una época de cambios, cambios en la formación de personas con discapacidad, en la mentalidad y la creencia de que las personas con discapacidad son trabajadores como los demás, ¿se ha avanzado en este sentido?

 

Sin lugar a dudas. Nosotros hemos transmitido en los últimos tiempos el mensaje de que tenemos que crear empleo para personas con discapacidad y ese mensaje se ha interiorizado en la compañía. Los propios gestores y directivos de la corporación han comprobado que realmente es un empleo rentable. E insisto, la contratación de una persona con discapacidad nos permite cumplir nuestro objetivo social, pero también el económico. Cuando ambos forman parte de la estrategia empresarial, se avanza más fácilmente. 

 

¿Cuentan con programas especiales de inclusión laboral de personas con discapacidad?

 

La inclusión es una prioridad para nosotros. Nuestro mayor empleador es Alentis, que ha firmado un convenio con FSC Inserta (empresa de recursos humanos de la Fundación ONCE) para crear 1.000 empleos en tres años y vamos a cumplirlo en dos. También firmaremos convenios de este tipo con otras de nuestras compañías, como la cadena hotelera Confortel y la agencia de viajes Viajes 2000. Nuestro principal aliado para la contratación de personas con discapacidad es FSC, pero si no los encontramos por esta vía, intentaremos buscarlos a través de asociaciones, ayuntamientos, o donde sea preciso. 

 

¿Cómo se consigue esa tasa de contratación de empleo entre personas con discapacidad en esta época de crisis?

 

En primer lugar, creyéndose el objetivo. Si lo crees, lo persigues. De momento, lo que sí hemos conseguido es trasladar esa idea y que la gente se convenza de que la rentabilidad económica y la social son posibles. Nuestros directivos se lo han creído y ahora sólo hay que poner los medios para conseguirlo. Al final, tenemos la suerte de tener una empresa de servicios muy intensiva en mano de obra, que nos está permitiendo crecer en ventas y en personal con discapacidad en plantilla. 

 

Las empresas a las que ofrecen esos servicios ¿creen en este trabajo y en los trabajadores con discapacidad?

 

Hay empresas que no ponen ninguna pega, pero todavía hay compañías en las que persiste una barrera difícil de derribar; de hecho, hay firmas que aún no han asumido el valor añadido de la contratación de personas con discapacidad. 

 

¿En todo este proceso de contratación existen programas para sensibilizar a las empresas que se muestran tan reacias?

 

Desde CEOSA, pero especialmente desde Fundosa, los programas de sensibilización son constantes. Firmamos convenios Inserta con muchas empresas, grandes y pequeñas. Yo destacaría el programa que hemos implementado de sensibilización de gestores y empleados, en el que comprueban que una persona con discapacidad puede trabajar en condiciones de igualdad.

 

Hace unos meses el CERMI y CEOSA alcanzaron un acuerdo de colaboración para la inclusión laboral de personas con discapacidad ¿qué implica para CEOSA este acuerdo?

 

Supone que somos proveedores preferentes del CERMI en todos los productos y servicios que podemos ofrecerles. Tenemos una gama de productos y servicios muy amplia -viajes, hoteles, seguros, limpieza, seguridad- que pueden encajar bien en las necesidades del CERMI. Todo ello redundará en el objetivo de inclusión laboral.

 

¿Y a qué se compromete el CERMI a cambio, cuál es su colaboración en este sentido?

 

Nuestra relación con el CERMI tiene que ser muy cercana, como entidad representativa de la discapacidad en España. El CERMI es uno de los mayores prescriptores que tenemos del servicio ATENDO de Renfe, que gestiona Alentis, una de nuestras compañías. Es un servicio muy valorado por sus usuarios. En la última encuesta de calidad y satisfacción que realiza RENFE alcanzó un 9’2 sobre 10 puntos. Creemos que el hecho de que el servicio lo preste personal con discapacidad es lo que permite esa valoración tan positiva.

 

Las alianzas en la sociedad civil, en el mundo de la discapacidad, son importantes y necesarias para fortalecer el sector ¿no es así?

 

Sin lugar a dudas. Nosotros estamos con el CERMI y cada vez queremos estar más unidos con todos los que apostamos por este objetivo, según el cual la rentabilidad económica y la social van en paralelo. 

 

¿Cuáles son los planes de futuro de CEOSA en un panorama quizás algo negro como el actual?

 

Nuestros objetivos son muy claros: superar la crisis y los problemas económicos que pueda haber en estos momentos y seguir creciendo. A partir de ahí, apostar por invertir y diversificar en nichos de mercado que sean intensivos en mano de obra y que nos permitan continuar ese camino, ese proceso de crear empleo para personas con discapacidad. En definitiva, hacer empresas rentables y sostenibles, a través de las cuales seguir cumpliendo nuestros objetivos sociales y económicos. 

 

¿Cree que se podrá alcanzar en algún momento una mayor sensibilización y más apoyo a la responsabilidad social desde el ámbito empresarial? 

 

Al pertenecer a la ONCE, la responsabilidad social la llevamos en nuestro ADN. En épocas como ésta, en épocas de crisis, muchas empresas e instituciones no valoran positivamente, como un plus, que apuestes por el empleo social y la integración laboral de las personas con discapacidad. En este sentido, en los concursos públicos, la valoración del precio ha aumentado incluso en ocasiones hasta un cien por cien, y valoran muy poco la responsabilidad social o la contratación de trabajadores con discapacidad. 

 

Nosotros competimos con grandes empresas y nos valoran igual que al resto, que a lo mejor no tienen empleados con discapacidad. En algunos concursos públicos que acaban de convocarse ni siquiera se pide o se valora el cumplimiento de la Lismi.

 

Por ello, sorprende mucho que cada vez hay más presión sobre las empresas privadas para que cumplan ese dos por ciento, pero en la empresa pública o las instituciones no se exige. Ellos no lo cumplen, pero lo más paradójico es que no lo exigen en los concursos que convocan.