¿Cómo ha sido el paso del deporte profesional a la política?

 

La verdad es que he estado durante muchos años en una burbuja, de la que salí hace poquito, la burbuja del deporte. Fue Fernando López Miras, el presidente de la Región de Murcia, quien me llamó y me pidió que entrase en política. Lo pensé y me di cuenta de que de alguna manera, sin apenas intención, siempre había luchado por empoderarme, porque el baloncesto en silla de ruedas es un deporte mixto, jugamos chicas con chicos, yo he sido un chico más y he trabajado la igualdad en ese terreno. Por eso me he dado cuenta de que todo lo que había trabajado durante los últimos años en el baloncesto podía repercutir en más personas, no solo en el deporte, se me ampliaba el escenario con la política.

 

Apenas llevas unos meses como diputada de la Asamblea de Murcia, ¿cómo está resultando la experiencia?

 

Está siendo brutal. Cuando iba a colegios a dar charlas a los pequeños siempre les decía que lo diferente nos hace más ricos y eso es lo que me está pasando en política. Yo soy la más torpe del grupo, pero la pasión que me caracteriza la traslado y me ven como la justiciera, lucho mucho por lo que creo y soy excesivamente pesada cuando quiero algo. Y en política defiendo la discapacidad, a la mujer y el deporte, pero como soy muy curiosa cada vez quiero más, por ejemplo en los últimos tiempos, con la pandemia, me he metido mucho en temas de comercio, economía... 

 

¿Cuáles han sido las principales responsabilidades o competencias que has asumido como diputada?

 

Estoy en la comisión de Educación y Cultura, en la que está también el deporte, y cada vez me meto más en temas de educación, de juventud, cultura y por supuesto de deporte. Y en discapacidad no quería entrar para que no se pensase que había sido elegida por una cuestión de marketing, pero al final tengo un potencial importante para trabajar en esto y si resulta que es beneficioso, pues mejor.

 

A mí la discapacidad me ha dado más que lo que me ha quitado, me ha dado una vida. No veo la discapacidad como algo negativo y si veo que alguien lo vive así, intento que lo veo a través de mi óptica, que lo vea a través de mis ojos, porque la vida es muy guay a través de mis ojos. No miro con compasión a las personas con discapacidad y si veo que una persona no lo lleva bien, intento ayudarla, pero no la miro con pena. 

 

Llevas toda la vida dedicada al deporte, de manera profesional desde muy joven, ¿qué crees que puede aportar el deporte a la política?

 

Todos los valores que te da el deporte: convicción en el trabajo que haces y no abandonar tras un 'NO', porque en el deporte pierdes, pero tienes que seguir entrenando, tienes que ganar, o conseguir objetivos. En política hay muchos 'NO' y tienes que seguir trabajando para que sea un 'SI'. Todos los valores que te da el deporte los traslado a la política, la pasión sobre todo, porque al final cuando trabajas con pasión, la gente lo ve y lo valora más.

 

¿Qué quieres conseguir para el deporte en tu faceta política?

 

El deporte es muy importante en la educación de las personas, pero se usa en política como arma arrojadiza, como campaña... lo que quiero es que se le de el valor que tiene. Por ejemplo, yo tengo un club de baloncesto en silla de ruedas y lo he usado como vía para que los chicos retomen los estudios, porque el deporte es un arma potentísima para la inclusión, no solo de las personas con discapacidad, sino de cualquier persona en riesgo de exclusión. Es una herramienta muy potente para mentorizar.

 

¿Y cuál sería el objetivo en el caso del deporte para personas con discapacidad?

 

Es necesario que el deporte para personas con discapacidad sea profesional de verdad. En España tenemos grandes atletas en deporte adaptado, pero si estuvieran profesionalizados serían aun mejores, imagina por ejemplo a Teresa Perales profesionalizada desde el principio, si ahora no tiene techo, pues en ese caso imagínate.

 

¿Y el deporte de base?

 

El deporte inclusivo debe llegar a los colegios ya, debería ser una materia más, de hecho una de mis primeras propuestas en la Asamblea fue sobre los recreos inclusivos, con un proyecto espectacular en el que se recuperan los deportes populares y tradicionales en los centros educativos, con niños con y sin discapacidad. Pero ya no solo luchamos por el deporte inclusivo, también por el deporte base en la propia discapacidad, que los menores con discapacidad sepan qué opciones tienen para hacer deporte y dónde deben dirigirse. Hacen falta muchas cosas en del deporte adaptado todavía. España siempre ha sido una potencia mundial en el medallero paralímpico, pero si bajas a categorías base, al principio, estamos todavía demasiado verdes.

 

Y como mujer con discapacidad, ¿qué crees necesario trabajar en favor de la mujer con discapacidad desde tu responsabilidad actual como diputada?

 

Hasta hace muy poco no me había dado cuenta de lo que podía representar yo, como mujer, deportista y con discapacidad, y ahora que he empezado a trabajar más mano a mano con asociaciones, me sorprende mucho ver el maltrato que sufren las mujeres con discapacidad y aunque no abogo por la supremacía de las mujeres, reivindico la igualdad, tanto en discapacidad como en el caso de las mujeres, pero es cierto que a la mujer con discapacidad hay que darle la mano y acompañarla para ocupar el puesto que le corresponde en el empleo y ayudarla en los problemas de maltrato. En violencia de género hacen falta todavía muchos recursos para las mujeres con discapacidad. Y desde luego, la incorporación de la mujer con discapacidad al empleo es muy importante. 

 

Una de tus luchas ha sido la creación de la Comisión de discapacidad en la asamblea de Murcia, ¿cómo sigue esa tarea?

 

La comisión la aprobamos en diciembre y estábamos esperando a que se constituyese cuando ha llegado la pandemia y hemos estado con la actividad un poco ralentizada, pero esta semana nos hemos incorporado a la asamblea y llevo todos estos días reclamando que se constituya, porque me parece imprescindible; la discapacidad al final afecta a tantos temas, que meterla en políticas sociales es quedarse corto, hay que trabajar educación, empleo, accesibilidad, vivienda... 

 

Creo que en la comisión se va a trabajar de una manera más específica y se conseguirán los objetivos más rápidamente. Además pedí que fuera una comisión especial, para que las asociaciones participaran también en la misma, porque me parece más fácil que sea el propio colectivo el que planteee las demandas a los políticos.

 

¿Cómo habéis vivido la pandemia en la Región de Murcia y qué tal se ha gestionado?

 

La gestión ha sido muy buena, nos hemos podido adelantar porque ha sido la última región a la que llegó y hemos tenido más tiempo para preparar la estrategia. Desde la consejería de salud el trabajo ha sido espectacular y también han hecho un trabajo buenísimo desde la atención primaria para que no se llegase a los hospitales desbordados... En nuestra comunidad ha fallecido una persona con discapacidad, para mí es un drama cualquier pérdida, uno ya es suficiente, pero al final el trabajo ha sido bastante bueno desde la Administración. 

 

¿La política te ha robado mucho tiempo de deporte?

Sí, era inevitable, pero además es que no sé hacer nada a medias y tenía muchísimo que aprender.

 

Los Juegos Olímpicos de Tokio, en los que participas con el equipo de baloncesto en silla de ruedas, se retrasan un año, ¿qué ha supuesto esta noticia después de tanta espera?

 

Llevaba 18 años intentando clasificarme para unos juegos y ahora que los tenía tan cerca, quedaban menos de 200 días, otra vez 500 días más de espera, ¡vuelta a empezar! El primer impacto de la noticia fue terrible, me enfadé muchísimo, pero luego me sentí mal, egoísta, así que respiré y me di cuenta de que era demasiado visceral y tenía que respirar y ver la magnitud de lo que estaba sucediendo. La constancia y el saber esperar, esos valores que nos da el deporte, de nuevo me hicieron fuerte.