Reportaje

Personalia, la atención personalizada

Cuidados mutuos

26/09/2012

Blanca Abella

Casi mil trabajadores pertenecen a la plantilla de Personalia. 944 empleados, entre los cuales se encuentran 196 personas con discapacidad, un 20,76% de la plantilla. Su labor, la de todos ellos, es la atención sociosanitaria a personas mayores dependientes. El encuentro entre personas mayores y personas con discapacidad despierta complicidad, entre otras sensaciones.

“Contamos con todo tipo de discapacidades para el desarrollo del día a día en nuestros centros,  las personas mayores lo que valoran es la atención y el afecto que les transmiten  nuestros trabajadores, que son quienes día a día están a su lado. En muchos casos los usuarios ignoran que quien está allí con ellos tiene una discapacidad o porque no se aprecia o porque no ven a quién les está atendiendo al otro lado del teléfono, pero saben que estamos ahí cumpliendo con nuestro lema “personas al servicio de personas”, relata Rocío Andreani, Jefa de Gestión y Administración RR.HH.

Personalia es ya un referente en la atención sociosanitaria a mayores dependientes y gestiona 8 residencias, 10 servicios de estancias diurnas y un departamento de Teleasistencia que se ha convertido en uno de los pilares de la empresa.

Su apuesta por la calidad se ha traducido ya en la obtención de certificaciones UNE EN ISO tanto en los servicios centrales como en gran parte de sus residencias y centros de día. Además, y casi por encima de todo, Personalia está implicada en la inserción laboral de personas con discapacidad.

Así lo explica la responsable de Gestión y Administración de Recursos Humanos: “Seguimos las directrices de la Fundación ONCE, y la preferencia es la incorporación de personas con discapacidad. Primero buscamos en la oferta de trabajadores FSC (Fundosa Social Consulting), luego en la Bolsa de Empleo de Afiliados y, finalmente, se abre a otras bolsas de empleo de asociaciones con las que tenemos contacto o agencias de desarrollo local. Y en última instancia, se busca a trabajadores sin discapacidad”.

La política contratación de Personalia se extiende a todos sus centros, tal y como nos confirma Zoraida Martínez, directora del centro de Parla: “El objetivo de Fundosa es crear empleo para personas con discapacidad, y nuestro objetivo además es la inclusión, es una forma de trabajo basada en la integración de personas. Los mayores lo viven también así y cuando ven a personas con discapacidad trabajando lo ven de forma muy positiva. No contratamos a personas con discapacidad por el hecho de tener discapacidad, tienen que cubrir el perfil, y todos los trabajadores que hay aquí desarrollan su perfil profesional igual que los demás”.

Parla es un centro peculiar, puesto que es el que más trabajadores con discapacidad tiene. En todo el centro trabajan 97 personas, y 40 de ellas tienen discapacidad.

Trabajadores capaces

Y al final, esta empresa consigue lo que todos ellos relatan en sus testimonios, una relación profesional, compañerismo, un trabajo con calidad, e incluso complicidad con el usuario. Pablo Martín Calderón, director general de Personalia, destaca este detalle: “Todas las funciones pueden ser cubiertas por personas con discapacidad, a pesar de que no siempre todas las discapacidades son compatibles con todas las funciones. Por ejemplo, no se nos ocurre poner a una persona con problemas de movilidad en la labor de levantar a personas dependientes; con FSC, en los inicios de Personalia hicimos un cuadro de compatibilidades, lo más amplio posible, tratando de dar oportunidades que en otros lugares se considera temerario, a nosotros no, todo lo contrario. Y tenemos situaciones muy interesantes, por ejemplo, un animador sociocultural ciego, con experiencia en animación sociocultural con jóvenes; ahora está con los mayores y es muy bonito e interesante ver cómo trabaja. Se produce incluso una complicidad entre el trabajador y el usuario. Es posible que algunas personas con discapacidad que han tenido que superar situaciones difíciles en la vida, entiendan mejor las dependencias de los mayores”.

De los 196 empleados con discapacidad que trabajan en Personalia, el 5,61% lo componen personal denominado de estructura, que se encuentra en oficinas centrales, en departamentos como Recursos Humanos, financiero, área de calidad, secretaría y Consejero delegado.

El resto de los empleados con discapacidad asumen funciones muy variadas. Hay animadores socioculturales, enfermeros, gerocultores o auxiliares de clínica, personal de mantenimiento, de limpieza, conductores, coordinadores del servicio de teleasistencia, fisioterapeutas, psicólogos, telefonistas, terapeutas ocupacionales...
Estos trabajadores, cuya labor es tan profesional como la de cualquier otro, presentan discapacidades muy distintas: física, psíquica y sensorial. Hay muchos trabajadores ciegos que son fisioterapeutas, otros con discapacidad psíquica que trabajan en limpieza, enfermeros o conductores con discapacidad física, gerocultores con discapacidad sensorial, etc.

Sin embargo, el trabajo de una empresa como Personalia requiere también una serie de perfiles que aún no pueden ser cubiertos en su mayoría por trabajadores con discapacidad, tal y como explica el director de Personalia: "Difícilmente podemos aspirar a ser un Centro Especial de Empleo por los servicios que ofrecemos, pero aunque no lo conseguimos, incluso estando en porcentajes importantes en este sector, sí se produce una escuela de integración impresionante".

La importancia de la formación

Zoraida Martínez introduce otra cuestión de gran valor en esta empresa, la importancia de la formación: “Si vemos que hay un perfil que no se ajusta a una vacante pero se puede solventar con cursos de formación, se habla con el departamento correspondiente y se ve si se puede ofrecer esa formación, ya que el principal objetivo es emplear a personas con discapacidad”.

De hecho, la empresa realiza una labor importante en este sentido, según afirma Rocío Andreani: “Una de las problemáticas que nos estamos encontrando es que, para el año 2015, según una normativa europea, todo el personal con perfil de gerocultor tiene que tener la titulación correspondiente en formación profesional, y hay muchos que a lo mejor tienen cursos de 600 horas y experiencia laboral extensa y ahora están sacando ese certificado de profesionalidad. Nosotros estamos facilitando dentro de nuestra formación continua esos módulos que necesitan. Hemos hecho un estudio de todos los trabajadores que tenemos y cuáles necesitan la formación  para la titulación y hemos incluido los módulos que se necesitan dentro de la formación continua. En general, la formación que hacemos en nuestros centros está muy orientada al trabajo del día a día. Nos implicamos y pretendemos que el trabajador también sea consciente y se implique”.

Según explica el director de Personalia, incluso se adelantan a la creación del puesto. Cuando Personalia, por ejemplo, tiene previsto la apertura de un centro nuevo, advierte de los empleos que se podrán cubrir a FSC, para que programe la formación adecuada para esas vacantes. La inclusión laboral de las personas con discapacidad sigue siendo la prioridad.

“No sólo queremos ser una experiencia práctica sino un referente para otros y nos exigimos un grado de calidad de élite. Estamos muy bien situados entre empresas que gestionan y realizan servicios con calidad, y eso lo hacemos con un mayor porcentaje de discapacidad en nuestra plantilla”, asegura Pablo Martín Calderón.
 
Y este trabajo, con calidad y profesionalidad, se consigue con normalidad, tal y como explica Rocío Andreani: “No se hace ningún tipo de diferenciación entre trabajadores con y sin discapacidad, se trata de que todos, dentro de nuestras posibilidades, lo hagamos de la mejor forma posible y ofrezcamos un servicio de calidad”.

“Entre los trabajadores la relación es normal, no hay diferencia ni dificultades, todo el mundo está totalmente integrado y no existen diferencias, de hecho muchos no saben si algunos compañeros tiene discapacidad o qué discapacidad tienen”, explica la directora del centro de Parla.