"4,32 millones de personas con discapacidad,
más de 8.000 asociaciones luchando por sus derechos"
Reportaje
Marea baja - Menor presencia de personas con discapacidad en el Parlamento
26/04/2019
Rafael Olea
Las elecciones del domingo 28 de abril conllevarán un profundo cambio en la representación de la discapacidad en las Cortes Generales. Los dos primeros diputados en silla de ruedas en el Congreso, los populares Francisco Vañó e Ignacio Tremiño, no estarán la próxima legislatura. Su relevo lo tomará –previsiblemente– el cabeza de lista de Unidas Podemos por Zaragoza: Pablo Echenique. En el Senado también causarán baja dos mujeres con discapacidad: Pilar Lima y Virginia Felipe.
En el año 2004, Vañó, nacido en Madrid en 1950, dio un fuerte impulso a la visibilidad de la discapacidad al convertirse en el primer diputado que accedía al Congreso en silla de ruedas.
Mucho se habló desde entonces de la falta de accesibilidad del Parlamento, que hubo que adaptar parcialmente para que pudieran intervenir. “Podemos hablar desde arriba –bancada– y abajo –espacio a nivel del suelo–, lo que no podemos es subir a la tribuna de oradores”. Sin embargo, advierte que “resulta un poco incomprensible que no pueda subir una persona con discapacidad”.
Junto con Vañó, su compañero de partido Ignacio Tremiño también abandonará el Congreso de los Diputados, tras ser elegido diputado por Valladolid, su ciudad natal, en la última legislatura. A falta de confirmación oficial y según las últimas noticias, concurrirá a las próximas elecciones autonómicas de la Comunidad de Madrid en el número 37 de la lista popular que encabeza Isabel Díaz Ayuso.
Tremiño, nacido en Valladolid en 1966 y licenciado en derecho, cuenta con una gran trayectoria en materia de discapacidad, tras haber sido director del Real Patronato sobre Discapacidad, director general de Discapacidad del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad (entre los años 2012 y 2016) y concejal de Acción Social del Ayuntamiento de Valladolid (entre 1999 y 2000). Asimismo, fue director de Desarrollo de Negocio del Grupo Ilunion entre 2010 y 2012.
Echenique
Y mientras Vañó y Tremiño causan baja en el próximo Congreso, quien –salvo sorpresa– será elegido diputado tras el 28 de abril será Pablo Echenique, quien tiene una enfermedad rara, atrofia muscular espinal. Nacido en Rosario (Argentina), vive en España desde que tiene 13 años, es físico y llegó a la política tras ser científico titular en el CSIC y escribir un blog sobre discapacidad en Eldiario.es.
Echenique considera su presencia en la política como una “oportunidad” para ser “el altavoz para las personas con discapacidad”, ya que se trata de un colectivo que, en muchas ocasiones, queda olvidado en materia de derechos e igualdades.
Cambios en el Senado
Lima, nacida en Valencia en 1977, fue la primera parlamentaria que intervino en las Cortes hablando en lengua de signos y reclamó que la discapacidad obtuviera más visibilidad en los partidos políticos y las instituciones. De hecho, considera que esta discriminación es consecuencia de las dificultades del colectivo para acceder a los estudios superiores.
Es importante destacar que, aunque Pilar Lima es la primera cabeza de lista de Unides Podem-EU a la Generalitat por la provincia de Valencia, no es la candidata a la presidencia de esa Comunidad Autónoma, puesto que ostenta Rubén Martínez Dalmau, que se presenta por la provincia de Alicante.
Lima, quien durante la actual campaña electoral protagonizó el primer mitin en lengua de signos, fue portavoz de la Comisión de Igualdad y vocal en la Comisión de Empleo y Seguridad Social de la Cámara Alta.
Virginia Felipe tiene atrofia muscular espinal y ha desempeñado un papel activo en visibilidad de la discapacidad –ha participado en programas de televisión- y es miembro del Comité de Apoyo del CERMI para el seguimiento en España de la Convención Internacional sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad.
Políticos vinculados con la discapacidad
Aparte de las bajas de Vañó, Tremiño, Lima o Felipe, la próxima legislatura también tendrá ausencias de diputados y senadores que han tenido una relación estrecha con la discapacidad, como el navarro Íñigo Alli, diputado por UPN en la Cámara Baja desde 2016 y portavoz del Grupo Mixto en la Comisión para las Políticas Integrales de la Discapacidad. Padre de una hija con Síndrome de Down, Alli ha tomado la decisión de abandonar la política y volver al mundo de la empresa.
Licenciado en Ciencias Biológicas y fundador de la Asociación Síndrom UP! por la Discapacidad, ex-Consejero de Políticas Sociales del Gobierno de Navarra, y ya ex portavoz del Grupo Mixto en la Comisión para las Políticas Integrales de la Discapacidad, ha desempeñado un papel crucial para que cerca de 100.000 personas con discapacidad intelectual puedan ejercer el 28 de abril su derecho al voto por primera vez.
En cambio, la presidenta de la Comisión de Igualdad del Senado, la popular Susana Camarero, aspira a repetir puesto. El pasado diciembre, recogió el Premio Cermi.es categoría Fundación CERMI Mujeres-Acción en Beneficio de las Mujeres con Discapacidad al Pacto de Estado contra la Violencia de Género, en cuya aprobación tuvo una “enorme contribución” el Senado.
Candidatos en elecciones locales
Asimismo, a falta de conocer las listas definitivas de políticos que concurren a las elecciones locales y autonómicas, previsiblemente los partidos irán anunciando nuevas personas con discapacidad en sus listas, además de los ya mencionados Pilar Lima (que se presenta por Valencia) o Ignacio Tremiño (por Madrid).
Una de las últimas incorporaciones de políticos con discapacidad a las listas ha sido el ex director general de Políticas de Apoyo a la Discapacidad (de noviembre de 2016 a julio de 2018), Borja Fanjul, quien se presenta en el número 6 por el PP al Ayuntamiento de Madrid.
Además, recientemente el Partido Popular ha presentado a varios candidatos con síndrome de Down en sus listas municipales. Son Jesús Bermejo por Cáceres, Susana Polo por Murcia y Carlos López-Sáez por Sevilla.
Sin embargo, y aunque solo sea por una cuestión estadística, teniendo en cuenta que en España hay cerca de cuatro millones de personas con discapacidad, la representación de este colectivo tanto en las instituciones como dentro de las listas electorales de los partidos continúa siendo escasa, como ya denunciara el CERMI hace una década.
